El vasco Lucas Eguibar -campeón del mundo de boardercross- y la catalana Queralt Castellet -bronce en el último mundial de 'halpipe'-, ambos en snowbard, serán, sobre el papel, las principales bazas españolas en los Juegos Olímpicos de invierno de Pekín, que se inauguran este viernes en la capital china, en la que España estará representada por catorce deportistas: nueve de deportes de nieve y cinco de hielo.
Lucas Eguibar
Eguibar, nacido hace 27 años en San Sebastián, ganador la temporada 2014-15 de la Copa del Mundo -competición en la que cuenta cuatro victorias y otros diez podios- y asimismo doble medallista de plata ante su afición en los Mundiales de Sierra Nevada 2017 (Granada), se proclamó campeón del mundo en Idre Fjäll (Suecia) hace justo un año.
El 'rider' guipuzcoano, diploma olímpico en los Juegos de Sochi'14 (Rusia) -fue séptimo- y abanderado de España en los Juegos de PyeongChang (Corea del Sur) hace cuatro años, optará a todo en el boardercross, disciplina en la que los tres últimos Globos de Cristal se las adjudicó el austriaco Alessandro Hämmerle. Esta temporada, 'Luki' subió al podio en Cervinia, donde fue tercero; y el pasado sábado acabó quinto, en Cortina d'Ampezzo, asimismo en Italia. Un resultado que "necesitaba, justo antes de los Juegos", según declaró a Efe después de una prueba en la que no entró en la final por un fallo inusual en él y en la que se impuso en la 'final pequeña'.
Castellet, de 32 y natural de Sabadell (Barcelona), disputará sus quintos Juegos en China, donde igualará la plusmarca española de presencias en citas invernales de la esquiadora alpina andaluza María José Rienda y del fondista cántabro Juan Jesús Gutiérrez.
Queralt, que será la abanderada española -junto al piloto de skeleton barcelonés Ander Mirambell- en la ceremonia Inaugural de este viernes, ya lo fue hace doce años en los Juegos de Vancouver (Canadá), donde, cuando ocupaba puestos de medalla (era tercera), se cayó entre ronda y ronda. Perdió durante unos instantes el conocimiento; y, como medida sanitaria preventiva, no se le permitió seguir compitiendo.
La 'rider' catalana, seis veces victoriosa en la Copa del Mundo -en la que cuenta otros diez podios- logró plata en los Mundiales de Kreischberg (Austria), en 2015; y el año pasado capturó bronce en los de Aspen (EEUU), donde ganó la estadounidense Chloe Kim, asimismo actual campeona olímpica, a la que la barcelonesa -diploma en PyeongChang, donde acabó séptima- intentará batir en China.
El barcelonés Quim Salarich, de 28 años, que fue olímpico en Corea y repetirá en China, será uno de los tres esquiadores alpinos. Inicialmente re-ubicado en el equipo B nacional, el de Vic, que competirá en eslalon, acabó logrando esta temporada -gracias al buen trabajo efectuado a las órdenes del técnico italiano Corrado Momo- dos 'top 15' en la Copa del Mundo: algo que no conseguía un esquiador alpino español desde hacía casi cuarenta años.
"Un buen resultado sería entrar entre los 15 primeros; uno optimista, quedar entre los primeros diez y uno para soñar, aunque es muy, muy difícil, sería una medalla", comentó a Efe Salarich desde Italia, desde donde partirá este sábado a China, Salarich.
El vasco Adur Etxezarreta, de 26 años, y la gerundense Nuria Pau, de 27, debutan en Juegos. El donostirarra disputará el descenso y el supergigante; mientras que la catalana, con escaso apoyo federativo -"es un premio estar aquí, pero me ha costado todo, incluso invertir todos mis ahorros", explicó a Efe desde China- afrontará el gigante.
Thibault Magnin y Javi Lliso, asimismo debutantes, competirán en esquí acrobático -o freestyle-. Magnin, nacido hace 21 años en Friburgo (Suiza), lo hará en Big Air y en slopestyle, disciplina en la que podría dar el bombazo si confirma la progresión que lleva: fue décimo en la prueba de la Copa del Mundo de Mammoth Mountain (EEUU) y séptimo en la de Font Romeu (Francia), hace poco más de dos semanas. El madrileño Lliso, de 25, también participará en esas disciplinas en China, donde competirán dos fondistas: Imanol Rojo y Jaume Pueyo.
Rojo, nacido hace 31 años en Tolosa (Guipuzcoa), olímpico en Sochi y en PyeongChang , afrontará sus terceros Juegos y disputará el skiatlon, los 15 kilómetros, estilo clásico; y los 50 kilómetros, estilo libre. El catalán Pueyo, de 20, debutante olímpico, competirá en la prueba sprint.
Mirambell, que debutó en Vancouver 2010, es el más veterano de los cinco deportistas que envía a Pekín de la Federación de Hielo, que en PyeongChang festejó el bronce del patinador artístico madrileño Javier Fernández; sólo un día después de que el 'rider' ceutí de la federación andaluza Regino Hernández capturase otra medalla de ese metal en el boardercross de snowboard para la de nieve. Ambos elevaron a cuatro la lista de medallas de España a lo largo de toda su historia en Juegos de Invierno: Paco Fernández Ochoa, el único campeón olímpico español en una cita invernal -fallecido en 2006- había ganado el eslalon de Sapporo'72 (Japón); y su hermana Blanca -fallecida en 2019- capturó bronce, asimismo en esquí alpino, en el eslalon de Albertville'92 (Francia).
A los 38 años, el barcelonés Mirambell será olímpico por cuarta vez y ejercerá, junto a Queralt, de abanderado en la ceremonia de este viernes.
Por primera vez en su historia, España estará representada en patinaje artístico por una pareja de libre: la que integran la madrileña Laura Barquero, de 21 años, y Marco Zandrón, nacido en Bolzano (Italia) hace 23.
También habrá representación española en la danza: la pareja que integran el barcelonés Adrián Díaz -de 31 años, que fue olímpico en Sochi formando dúo con la madrileña Sara Hurtado (que a su vez compitió en PyeongChang con Kirill Jalyavin, de origen ruso)- y Olivia Smart, nacida en Sheffield (Inglaterra) hace 24 años.