Fórmula 1: otro brutal recado en la pista de Carlos Sainz a Charles Leclerc

El Gran Premio de Abu Dabi de Fórmula 1 nos deparó, como estaba previsto, otro duelo mano a mano entre Charles Leclerc (Ferrari) y Carlos Sainz (McLaren). El español salía más adelantado que el monegasco, pero ambos se encontraron frente a frente en la vuelta 14. Justo después de que una avería de Sergio Pérez (Racing Point) diera entrada al 'Safety Car'. Dicho momento fue aprovechado por casi todos para hacer la primera parada... menos los dos pilotos de Ferrari y el Renault de Daniel Ricciardo. Tanto Leclerc como Sebastian Vettel estaban, en la reanudación, por delante de Sainz. La batalla estaba servida.

Y la ganó de forma espectacular el piloto madrileño. Sainz frenó tardísimo ante Leclerc al final de recta y le metió el coche de forma impresionante. Se sucedieron unas curvas en las que la presión del monegasco era terrible sobre el McLaren. Pero Sainz aguantó y fue dejando poco a poco atrás al que será su próximo compañero de equipo. Era el momento de ir a por el Ferrari de Vettel. Y el madrileño dio pronto buena cuenta del alemán. Un claro mensaje, por otra parte, a la escudería italiana: habrá que mejorar el futuro monoplaza para aspirar a todo en la Fórmula 1.

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Porque Carlos Sainz quiere aspirar a todo. Fue investigado por ir demasiado lento en la calle de boxes, pero quedó pospuesto para después de la carrera. A mitad de la misma, el español se encontraba séptimo. Alexander Albon (Red Bull) estaba lejos en el cuarto puesto. Más cerca tenía a Ricciardo y a su compañero en McLaren, Lando Norris, aunque sin posibilidad de alcanzarlos. El único Racing Point que seguía, el de Lance Stroll, pudo con Leclerc, pero le costaba alcanzar al Ferrari de Vettel y marchaba décimo. Era la otra batalla, la del Mundial de constructores.

Norris parecía inalcanzable para Sainz, que esperaba tranquilo a que Ricciardo entrara de una vez en boxes, pues Pierre Gasly (Alpha Tauri), octavo, estaba demasiado lejos del español. El australiano de Renault apuró los neumáticos hasta el final: entró a cambiarlos en la vuelta número 40 (de 55). Regresó séptimo, lejos de Sainz pero con neumáticos mejores. Quedaban diez vueltas y los segundos que los separaban eran también diez. No podía cometer errores.

Y el español no lo hizo. Las últimas vueltas sólo tuvieron el interés de saber si Lewis Hamilton (Mercedes) tenía que cambiar de nuevo de neumáticos, al haberlos desgastado mucho. También Verstappen, que lideraba la carrera cómodamente sobre Valtteri Bottas (Mercedes). No lo hicieron ninguno. De hecho Hamilton llegó a presionar a su compañero finés tras varios errores de éste. Resistió.

Así acabó en Yas Marina la última prueba de una temporada atípica pero histórica. Hamilton celebró su séptimo Mundial. McLaren, a la espera de que finalice la investigación sobre Sainz, logró un fantástico tercer puesto en constructores. Carlos, aunque no pudo con Norris esta vez y se seguirá lamentando por los puntos perdidos al principio de la temporada, firma una despedida de McLaren muy positiva: termina sexto en el Mundial, a 14 puntos de Ricciardo, pero empatado con Albon, con todo un Red Bull en sus manos, por delante de su compañero Norris (+8) y sobre todo de Leclerc (+7) justo antes de su aterrizaje en Ferrari. Frótense las manos para temporada 2021 en la Fórmula 1.