Si prácticamente toda la Fórmula 1 daba por hecho hace unas semanas que Lewis Hamilton iba a renovar con Mercedes, el paso del tiempo ha ido añadiendo dudas. Queda algo más de dos meses para el inicio de la temporada y el piloto británico no ha ampliado aún su contrato con la escudería alemana. De hecho, ahora mismo no tiene contrato con ningún equipo y su asiento tiene colgado oficialmente el cartel de disponible. Es el único de la parrilla sin dueño. Pero en las últimas horas, el padre de Lewis, Anthony Hamilton, ha tranquilizado al mundo del Gran Circo: "Hasta dónde yo sé, va a seguir".
Las palabras del padre de Hamilton fueron pronunciadas Express.co.uk y sirvieron también para dar un respiro a todos los fans del heptacampeón mundial. "Le encantan las carreras, le encanta lo que hace", añadió Anthony, quien reconoció que habla con su hijo prácticamente a diario y que dice lo que dice con conocimiento de causa.
Hasta la fecha han trascendido algunos de los problemas que impiden cerrar el acuerdo de renovación de Hamilton con Mercedes. Se unen, principalmente, dos aspectos: el económico y el temporal. El piloto británico quiere más de 40 millones de euros por cada una de las cuatro temporadas que firmaría. A sus 36 años se trata de una cuenta que Mercedes debe hacer bien, por mucho que el inglés siga actualmente en plena forma y el Mundial que viene se le presente más que favorable para volver a ganar.
Hay, además, diferentes teorías que añaden más argumentos a la negativa actual de Mercedes a aceptar las condiciones que pide Hamilton. Una de ellas la publicó el expiloto Mark Webber y viene a decir que el fantástico rendimiento de George Russell sustituyendo a Hamilton en Baréin zarandea los planes de futuro del equipo tan a largo plazo.