La guerra civil en Red Bull: Fernando Alonso puede pescar en río revuelto
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Red Bull ha quedado muy tocado tras las acusaciones a Christian Horner
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El padre de Max Verstappen asegura que "no puede seguir en el equipo"
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Quien iba a decir que el equipo más dominador de los últimos años, el que ha conseguido tres campeonatos del mundo seguidos y el que tiene el mejor monoplaza de la parilla iba a ser el más inestable. Red Bull es ahora mismo una caja de cerillas, un polvorín, y hay muchos satélites orbitando alrededor ¡Hasta Fernando Alonso puede pescar en río revuelto!
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Todo empezó durante la pretemporada. La investigación a Christian Horner -el CEO de la escudería- por supuestamente enviar imágenes de contenido sexual a una empleada dividió al equipo. Finalmente, se concretó que Horner siguiera en el cargo, algo que no ha gustado para nada a Jos Verstappen. El padre del tres veces campeón del mundo no ve con buenos ojos que Horner siga en Red Bull, de hecho lo quiere fuera y a no mucho tardar. Incluso, ya ha pedido su cabeza públicamente: "El equipo está en peligro de partirse, va a explotar, hay tensión mientras él siga en el puesto".
Con Horner sin querer marcharse y con Jos Verstappen queriendo que se marche, se han creado dos clanes muy diferenciados dentro de la escudería de las bebidas energéticas. Se especula incluso con que desde Max hasta Adrian Newey puedan tener cláusulas en sus contratos que les permite marcharse en caso de que Horner también lo haga.
Para colmo, Toto Wolff anda pendiente a la situación. El mandamás de Mercedes ha quedado con el orgullo tocado tras la marcha de Hamilton a Ferrari, y quiere resarcirse a lo grande. Para ello, podría estar pensar en fichar al mismismo Max Verstappen, asestando así un doble golpe a sus dos grandes contendientes por el campeonato, Red Bull y Ferrari.
En toda esta ecuación también hay sitio para Fernando Alonso. El piloto asturiano aún no ha firmado la renovación con Aston Martin, esperando a que las fichas del dominó empiecen a caer y le den la oportunidad de conseguir un monoplaza con el que luchar por su tercer título mundial. Si Max Verstappen ficha por Red Bull y con Lewis Hamilton en Ferrari, no cabe duda que los austriacos intentarían el fichaje del asturiano, que acabaría por dinamitar la parrilla de la Fórmula 1.