El decreto que prepara el Gobierno para incorporar a parados e inmigrantes en el campo
En plena crisis sanitaria y económica a causa del coronavirus COVID-19, el Gobierno está llevando a cabo un real decreto para flexibilizar la contratación en el campo e intentar paliar el desabastecimiento y la subida de precios que está provocando la pandemia. La iniciativa está considerada de "urgente" y estará en vigor el próximo 30 de junio.
Según publica El País, el Gobierno está ultimando la aprobación de un decreto que tiene la intención de flexibilizar la contratación en el campo de personas paradas e inmigrantes sin autorización de trabajo para atajar la falta de mano de obra. El decreto pretende aliviar el déficit de temporeros en las campañas y evitar el desabastecimiento alimentario y alza de precios en plena pandemia.
El decretado estado de alarma en España, con el consiguiente confinamiento y restricción de movimiento de personas, ha provocado que miles de trabajadores se queden en sus casas, afectado así el inicio de las campañas agrícolas. Trabajadores temporeros procedentes de Marruecos, Bulgaria o Rumanía no han podido desplazarse y, según la citada fuente, supone la mitad de una cifra de 300.000 asalariados temporales.
La medida incluye que se le dará prioridad a esos extranjeros cuyos contratos concluyan durante el periodo comprendido entre la declaración del estado de alarma y el próximo 30 de junio, y aquellos cuya regularización esté pendiente de concluir los trámites administrativos. También se aplicará a aquellos solicitantes de asilo que lleven menos de seis meses en España y aún no tienen permiso para trabajar, así como jóvenes migrantes extutelados entre 18 y 21 años.
Además, el real decreto haría compatible la prestación por desempleo con otras ayudas sociales, contributivas o no, con la contratación para tareas agrarias. También incluye a esos trabajadores cuyos contratos estén suspendidos a causa de un ERTE, pero no a aquellos que el ERTE esté vinculado a la crisis del coronavirus.
