‘Windsor Buoy’ se adjudica el décimo Memorial Javier Piñar Hafner
Borja Fayos ha regresado al turf español con muchas ganas. No ha desaprovechado ni una monta desde que hace mes y medio reapareciera con una victoria a lomos de Deauville Azul. Sus números así lo demuestran: en siete jornadas, en las que ha competido en 27 carreras, ha conseguido 5 victorias y 14 colocaciones, siendo el segundo mejor jockey del invierno tras un sensacional José Luis Martínez.
Lo más importante es que Fayos no sólo está sumando casi siempre, sino que, además, está ganando carreras importantes. Si el domingo pasado daba el golpe con Fortun en el Gran Premio Cruzcampo, la prueba más importante de la temporada para los fondistas, hoy ha hecho lo propio con Windsor Buoy en el Memorial Javier Piñar Hafner, el gran premio de los tres años que celebraba su décima edición. A este ritmo, desde luego, no le va a faltar trabajo.
El triunfo de hoy tuvo que trabajarlo. Las carreras anteriores habían demostrado que, con la pista tan pesada por la intensa lluvia caída, para ganar había que correr en punta. Al comienzo de la curva final, cuando aún quedaban muchos hectómetros para el poste de meta, ya se le veía bracear con insistencia. Quería que Windsor Buoy, al que le cuesta entrar en acción, fuera entrando en calor y no se separara de la grupa del puntero Huerta Grande, que estaba imponiendo un buen paso. En esos momentos se decidió buena parte de la suerte del gran premio, ya que Esquilero, vencedor en la preparatoria y favorito en las taquillas de apuestas, no era capaz de abandonar la parte trasera del lote. Sufría con tanto barro. El rival a batir quedaba descartado para el triunfo.
Ya en el derecho, Huerta Grande cedió, aunque su buena actuación se vería recompensada con el bronce. La carrera la iban a pelear Windsor Buoy y Valilla, si bien es cierto que la lucha no duró demasiado, ya que la segunda, con la que Óscar Anaya aspiraba a ganar su tercer Memorial seguido, se mostró incapaz de responder el remate poderoso de Windsor Buoy, el que más fondo tenía del grupo y el que, por tanto, se vio más beneficiado por la dureza añadida de la pista pesada.
La jornada estuvo marcada por un insólito hecho que pasará a la historia de las carreras de caballos en España, ya que el jovencísimo gentleman sevillano Ignacio Melgarejo, de tan sólo 16 años, consiguió su segunda victoria en su segunda carrera como jinete amateur al ganar con David’s Divina en los 1.200 metros del Premio Real Maestranza de Caballería de Sevilla. La rapidísima yegua de Lisselan Farms se presentaba tras encadenar cuatro segundos puestos seguidos y, por fin, se reencontró con el sabor del triunfo al culminar un recorrido en punta. “Con el agua de la lluvia en las gafas no veía nada”, dijo el protagonista nada más bajarse de la montura, excusándose así del cambio de línea que realizó en los metros finales, aunque éste no dio la sensación de molestar decisivamente a Golfo Pérsico, que acabó segundo, mientras que el trío lo completó Lolita Pluma.
Justo antes, Juan Daniel volvió a demostrar que ha sido uno de los caballos más en forma de esta temporada de invierno que terminará el próximo domingo. El ejemplar de la cuadra Jerezana, con la monta del prometedor portugués Ricardo Sousa (sigan de cerca a este aprendiz, pues todas sus montas son muy correctas), se impuso prácticamente de punta a punta en el Premio Cría Nacional, previsto esta vez sobre 1.400 metros. El pensionista de José Calderón, más derecho que nunca en su remate, completó posiblemente su mejor actuación en el meeting nazareno, que va a cerrar con un balance formidable: dos victorias y dos colocaciones en cuatro salidas.
Las dos mangas del hándicap dividido sobre 1.800 metros tampoco dejaron los triunfos de sendos ejemplares que han demostrado gusto por la pista y que habrán de confirmar estas buenas sensaciones en sus próximas actuaciones. En la primera parte, Diego Sánchez demostró que no es casualidad que se haya hecho un hueco en un turf tan competitivo como el estadounidense. En el Premio Turismo Andaluz, venció con Lucky David después mantener una dura pugna con Crack en el final más apretado de la jornada (Ahora No fue tercero). Gustó que en los metros finales, cuando veía que su oponente no tenía fuerzas para rebasarlo y que su caballo tampoco andaba sobrado, se limitara a mantenerlo en cabeza con las riendas. A sus cuatro años, y por culpa de una lesión que lo tuvo mucho tiempo fuera de la competición, sólo ha corrido en siete ocasiones, aunque sus dos triunfos en Dos Hermanas sirven como aval para pensar que puede ser rentable allá donde corra.
En la segunda parte, Premio Emasesa, ganó Samsara, yegua a la que la conexión lusa formada por el preparador Tiago Martins y jockey Marino Gomes está sacándole mucho provecho. Ya venció en su primera carrera de la temporada, y tras un engañoso quinto puesto en su última salida, hoy volvió a vencer y convencer con un recorrido muy cómodo ya que ni Fol Moon, que fue segundo, ni Vanity Fair, que cerró el trío, la amenazaron mucho.