Nacho Romero decanta la victoria del lado del Por Huelva ante el CB Sevilla (60-52)
Estaba claro que no iba a ser un partido fácil. Estaba claro. Jugar contra el último clasificado, en casa, y con poca concentración inicial es complicado, y fue complicado.
El Baloncesto Sevilla es un equipo al que no le duelen las derrotas, que no tiene presión y que solo juega por aprender, así es fácil.., y difícil para los equipos rivales, que no pueden permitirse perder ante el colista. Así comenzó el partido, y así duró hasta el tercer periodo que un inconmensurable Nacho Romero decidió. Todo lo hizo él y bien.
En los dos primeros periodos, parecía que los equipos no se jugaban nada, muy light todo, con defensas que superaban constantemente a los ataque. El Baloncesto Sevilla pronto entendió que en defensa individual no tendría nada que hacer, Nacho Romero podía con todo lo que se ponía por delante, y así pasó a una defensa en zonas 3-2 que hizo mucho daño a la escuadra local. Se atascó en ataque y su 0-9 en triples antes del descanso, hacía presagiar mal el futuro. Descanso: 22-24
El pistoletazo del tercer periodo no podía ser peor, el Baloncesto Sevilla acertaba en sus ataques y el onubense se atascaba en sus paupérrimos porcentajes de tiro. Tiempo muerto y equipo a la espalda de Nacho Romero..., mano de santo. Siete puntos consecutivos del pivot más longevo de España, volteaba el marcador y a partir de ahí, todos sus compañeros comenzaron a dar el do de pecho y cerrar el partido antes de su final.
Un tercer periodo decisivo, en el que B. Sevilla no pudo en ningún momento con los ataques del Por Huelva, ni en individual ni en zona 3-2. Aquí se decidió todo. Y un nombre: Nacho Romero.
El último parcial fue táctico. El Por Huelva quería ataques largos y el Baloncesto Sevilla rapidez y robos. En este ámbito el equipo local se mueve como pez en el agua, sus bases alargan las posesiones, sus jugadores hacen que pase el tiempo rápido y sus ataques se hacen muy tácticos. Aquí se vio la juventud del equipo rival, ya no se acercó en el marcador y el final del partido fue más plácido de lo que el marcador señalaba. Final del partido: 60-52
