El malagueño Pablo Guerrero, a punto debutar como profesional
Desde la ciudad de Oporto, Pablo Guerrero cuenta las horas para el que será su debut en la categoría profesional. El corredor del Radio Popular Onda – Boavista se estrenará como continental en la Volta ao Algarve (2.1.) que comienza el próximo miércoles. Un sitio realmente complicado pero a la vez hermoso para cumplir el sueño de su vida de dedicarse profesionalmente al cilcismo.
El de Coín ya lleva una semana con su equipo en la urbe lusa y viaja mañana a la región del Sur. Concentrado, adaptándose al grupo: “Llegamos aquí el pasado martes. Lo malo es que el tiempo no está acompañando demasiado. Hemos combinado entrenamientos en grupo con sesiones de rodillo, porque con el temporal era imposible salir”, comenta Pablo, que también vivió la presentación de la escuadra el pasado sábado.
Además, destaca “el buen ambiente y el trato personal y cercano con todos los compañeros y directores” en esta segunda toma de contacto, pues la primera se remonta al pasado mes de diciembre y fue más bien para pasar las pruebas rutinarias: “Nos están ayudando mucho”, remata.
En cuanto a la carrera que le espera, Pablo es consciente de la dificultad del escenario que le ha tocado y ya le saca el lado positivo incluso antes de empezar: “Van a ser días de aprendizaje. Aquí se va muy rápido y vienen equipos de primer nivel con figuras internacionales”. Mucha artillería para alguien que va a cubrir sus primeros kilómetros en carrera del año: “Nosotros vamos con un poco más de calma. Empezamos justo ahora, mientras que ellos ya llevan varias semanas compitiendo casi todos. No va a ser fácil, pero voy con muchísima ilusión y ganas de adaptarme rápido”, confiesa.
Sin embargo, el malagueño también es ambicioso: “Si tengo la oportunidad y el equipo me lo pide, me dejaré ver en carrera. Es mi forma de correr, pero sé que estoy en proceso de adaptación”. Pablo Guerrero por fin verá cumplido su sueño de compartir pelotón con los mejores ciclistas del mundo. Contador, Kwiatkowski, Urán, Tony Martin… “sólo por eso ya vale la pena”, termina.