Apto y no apto
Andan enfrascados los que organizan el concurso en encontrar la "fórmula perfecta" para que el jurado califique a las agrupaciones de la manera más justa posible y este año se han ideado, aunque solo para la fase clasificatoria, los determinantes veredictos de "apto y no apto".
La fórmula me plantea muchas dudas, sobre todo porque no conoceremos la posición final de casi el 60 por ciento de las agrupaciones que se presentan al concurso y que quedarán ubicadas en el mismo saco, bajo la lapidaria sentencia, (cual Familia Verdugo) de no aptos. Imagino que a muchos aficionados les da igual la posición en la que ha quedado cada agrupación calificada como no apta, pero seguro que a otros muchos y a los propios interesados, les gustaría saber si dentro de los no aptos, se ocupa la posición 20 ó la 59, que no es lo mismo. Por poner un ejemplo escolar, si un alumno saca de nota de calificación un 4,5 y otro un 0, ambos no han aprobado, pero el primero ha trabajado algo más que el otro y eso es de valorar.
Otro factor a destacar es que si se desconoce el número exacto de agrupaciones que pasaran a la fase de cuartos por cada modalidad, pudiera ocurrir que el jurado se viera obligado a rectificar su primera decisión de apto o no apto con algunas agrupaciones, a tenor de las necesidades y el equilibrio en la programación de las funciones de cuartos.
No obstante, se comenta que los miembros del jurado sí que están puntuando, aunque a nivel privado y sin que se vayan a hacer públicas dichas puntuaciones. Seguro que el jurado mediante esas puntuaciones va a tener en la mano y rápidamente la lista de los aptos y clasificados, de ahí el desmentido del presidente del jurado a la concejala María Romay, cuando esta comentó que el veredicto del pase a cuartos se comunicaría al día siguiente, pensando que la deliberación del jurado sería muy larga y tediosa.
Al tradicional modelo de puntuación, se le está buscando una alternativa que equilibre el gusto del jurado, con los fríos números que se plasman en las cartulinas de cada vocal. Yo nunca me creí que una agrupación le ganara a otra por un punto, siempre pensé que al jurado le había gustado más determinada agrupación y la justificación tangible, es ese punto diferenciador entre ambas. Por tanto, creo en el sistema de calificación por puntos, pero siempre como un instrumento en beneficio del jurado y nunca para un jurado esclavo de ellos.
De cualquier modo, veremos qué recorrido tiene esta nueva norma, que viene a modificar en parte, lo que tradicionalmente ha sido el sistema de puntuación del jurado oficial del COAC.
Manolo Catalán, chirigotero y jurado del COAC en 2005