Hierro-Herrmann: dos retiradas entre la nostalgia y los antidepresivos
El Instituto Andaluz del Deporte (IAD) acogió la segunda charla-coloquio del ciclo de conferencias sobre Deporte y Salud del Proyecto 675 que lidera Berni Rodríguez. Fernando Hierro y Walter Herrmann, dos personalidades de buen recuerdo para la ciudad de Málaga, fueron dos de los protagonistas, además de la exdeportista y actual coordinadora de deportes de la ONCE, Irene García, y Carlos de Teresa, especialista en medicina deportiva. Sole López, jugadora del Rincón Fertilidad, tuvo que ausentarse a última hora por un asunto personal.
En esta edición, titulada 'La Prórroga', se abordó el complejo momento que tiene que afrontar un deportista de élite que, tras una exitosa carrera profesional, tiene que comenzar una nueva vida desde cero. Sobre ello aportaron bastante Hierro, que después de colgar las botas inició diferentes etapas que llevaron desde el cargo de Manager General en el Málaga CF hasta seleccionador español en el pasado Mundial, y también Herrmann, al que en 2018 homenajeó el Unicaja con un emotivo acto en el Martín Carpena.
Hierro, que jugaba para el Bolton inglés cuando se retiró, explicó así cómo decidió poner fin a su etapa como jugador: "En un entrenamiento en marzo o abril me planteé que me estaba divirtiendo, que estaba en la Premier, que me encantaba, pero que cumplía 38 años. Pensé que si estaba disfrutando por qué no dejarlo. Con contrato en el Bolton entendí que era el momento. Quería recordar mi profesión durante toda la vida en positivo. Fui un privilegiado porque yo tomé la decisión de dejarlo estando físicamente bien". Después, azuzado por su hermano Manolo Hierro, le picó el gusanillo y continuó su trayectoria como Manager General, director deportivo y entrenador.
Herrmann y la charla con Batistuta que le devolvió a las pistas
Diferente es el caso de Herrmann, que guardó y desempolvó las botas en varias ocasiones. "En 2010 salgo campeón en Vitoria, pero extrañaba mi país y decidí dejarlo. Estuve tres años retirado, no sabía qué hacer. Iba de un lado para otro terminando una casa y cuando la terminé mi agente me llama para ver si tenía ganas de jugar. Volví en la Liga Argentina y me pasó lo mismo con casi 38 años". Ahí lo pasó mal: "Estuve seis meses bien y después lo pasé mal. No dormía, me sentía inútil, me mandaron antidepresivos".
Fue entonces cuando habló con un icono del fútbol como Gabriel Batistuta. "Me aconsejó muy bien. Lo que hice fue, sin representante, llamar a un equipo argentino la pasada temporada y firmé un contrato. Pero antes del play off padecí una arritmia y estuve 45 días en reposo total. Ahora lo llevo mejor, pero hace 20 días empecé a jugar en la Liga de Mijas. Es muy difícil elegir el día para retirarse. Por ahora entreno, pero nunca se sabe", dijo entre sonrisas deslizando una posible vuelta a las canchas en el futuro.
La visión de Ben Barek
Escuchando atentamente, como una persona más del público, el mito Abdallah Ben Barek. Genuino, cordial y amable como siempre, habló de su experiencia. "Tuve suerte, no pasé lo que han pasado la mayoría de jugadores. De jugador ya pensaba en el futuro, quería ser entrenador. Empecé a prepararme, hice los cursos y me hice entrenador. Tuve la suerte que en el camino me encontré con personas que influyeron en mí. Una muy importante fue José María Zárraga, antiguo gerente del Málaga. Me llamó para cenar con él y me dijo que el Málaga no iba a contar conmigo como jugador, pero sí como entrenador, y que el Zaragoza me había llamado para irme allí. Me aconsejó no irme y me hizo pensar, me tomé una semana para pensar y le dije que me quedaba".