A falta de fútbol... ¡chapas! Una versión renovada para la cuarentena

Es tiempo de inventiva, de proyectos caseros que estaban olvidados, de buscar la rendija para el divertimento. No es fácil llevar el día a día entre cuatro paredes, la crisis por el COVID-19 afecta a todos sin excepción. Por supuesto, a los deportistas, ya sean de élite o de andar por casa. Se ha terminado el salir a correr, echar una pachanga con los amigos o ir al gimnasio. Soluciones hay, pero hay que buscarlas. Y aquí os queremos proponer una: recuperar las chapas. Sí, las míticas chapas que nuestras pasadas generaciones disfrutaron en plena calle. Ahora, con los nuevos tiempos, el fútbol chapas -su nueva nomenclatura- aparece en nuestras vidas y ofrece un remedio perfecto para superar la cuarentena.

Y no es que las chapas regresen ahora cual aparición mariana, qué va, es que en Málaga -y en buena parte del país- vuelven a estar de moda. Lo pone de manifiesto el Club Fútbol Chapas Málaga, que ha relanzado esta modalidad y hace poco organizó con éxito el I Open Nacional en el Rincón de la Victoria. Ellos han recuperado las chapas (ver galería inferior) y tú, desde tu casa, puedes sentir lo que tus padres o abuelos vivieron años atrás. Ahora, eso sí, necesitarás un poco de ingenio para fabricarte tu propio campo.

Para el tapete nos las podemos ingeniar con un cartón de una caja alargada que simule las dimensiones de un campo de fútbol (podemos dibujar las líneas con rotuladores, por ejemplo), mientras que las porterías podemos recortarlas con el mismo material y adherirlas al campo. Si tenemos en casa algún tipo de tejido que simule una moqueta, o una tela que superponer para amortiguar la pelota, mejor que mejor. No será un terreno de juego profesional, pero no olvides que nuestros mayores jugaban en la gravilla o en la tierra, a ras de suelo. Para el balón, en esta ocasión, siempre podemos optar por un garbanzo y, en el caso de no tener chapas, nos pueden valer tapones de botellas como medida excepcional.

Las reglas del fútbol chapas

Obviamente, esta nueva versión tiene sus normas. Se enfrentan dos participantes, cada uno con once 'jugadores', en dos tiempos de 15 minutos cada uno. El juego transcurre mediante turnos y, una vez finalizado el turno, éste pasa a ser del rival y así irán intercalándose hasta que las dos partes concluyan. En cada acción se puede desplazar una chapa o, si el balón está en campo rival, disparar a portería -empujando la chapa contra el balón- para intentar marcar gol. Obviamente, el efecto, la dirección y la potencia del disparo la controla el propio jugador. Es importante destacar que cuando uno de los jugadores dice "a puerta", el otro jugador podrá colocar su portero dentro del área pequeña. El que más goles marque, huelga decirlo, gana el partido. ¡A divertirse!