Campeonato de Parejas: un respiro por favor

¡Se acabó lo que se daba!

Sí, la liguilla de cuartos de final del Campeonato de Parejas 2016 ha echado el telón por este año.
¡Qué gozada!
Ha habido partidos buenos, partidos no tan buenos y… partidazos. Emoción hasta la última jornada, frontones casi llenos, frontones llenos y… llenazos (el ambiente del Labrit es algo difícil de igualar para cualquier otro deporte; sin duda ese espejo pamplonica es donde deberían mirarse el resto de canchas del país; y no dudo que lo estén haciendo).
¡Y todavía queda lo mejor!
…
Pero…, pero ¿qué? Que por qué no paramos un poco. ¿A qué tantas prisas? ¿Por qué no nos tomamos un respiro? ¿Por qué no esperamos una semana, una semana no más, para iniciar la siguiente fase del Campeonato, la Liguilla de Semifinales? ¿Por qué todo tan seguido? ¿Acaso los mejores gladiadores del circo romano no precisaban también de un cierto tiempo para restañar sus heridas, recomponer sus huesos y ponerse en las mejores condiciones antes de volver a saltar a la arena o antes, en nuestro caso y en nuestro deporte, de volver a saltar a la cancha y continuar peleando hasta la Final?
Por eso, para años y ediciones venideras, yo propongo un respiro. No, mejor tres. Un primer descanso, apenas una semana, ¿qué son 7 días?, entre el final de la primera vuelta y el inicio de la segunda durante la disputa de la mencionada Liguilla de Cuartos; un segundo, entre el final de esta Liguilla de Cuartos y el inicio de la siguiente Liguilla de Semifinales; y por fin, un tercero entre el final de la Liguilla de Semifinales y la disputa de la gran Final.
Y teniendo en cuenta, además, que esos respiros, esos 7 días de descanso servirían para calentar mejor los motores de los pelotaris en liza, los tensos ánimos de los aficionados que no verían el momento en que la competición fuera a reanudarse. Y 7 días donde se dejaría el espacio preciso para el cruce, polémico o no, de declaraciones entre los protagonistas, para avivar el fuego del Torneo y afilar cuchillos; figuradamente, claro. Porque desde el término de la Liguilla de Cuartos ya no se recogen casi prisioneros. Los errores, las derrotas tienen un marchamo de irreparable fatalidad.
Sí, las prisas nunca son buenas consejeras. Todos lo sabemos y sin embargo nos empeñamos, y sin que acierte a darme una explicación, en ir a todas partes corriendo. A toda hostia. Sin parar. Y, en este sentido, no estoy muy seguro de que lo estemos haciendo bien… o todo lo bien que este maravilloso deporte se merece.
Las sustituciones de los pelotaris lesionados han sido numerosas. Las refriegas son intensas. Los músculos se resienten. Pero sin los preceptivos descansos no sólo los músculos sino la propia competición, acaba resintiéndose. Y esto ya me parece más grave.
El pasado domingo terminó la Liguilla de Cuartos y sin solución de continuidad, sin darnos tiempo para echarnos un pote ya estamos este fin de semana con la Liguilla de Semifinales. ¿Resultado de tener la garganta seca, resultado de las prisas? Albisu, baja; Bengoetxea, baja. Y me pregunto y repito para terminar, ¿se merece el Campeonato semejante desagravio?, ¿no se deberían poner todos los medios a nuestro alcance, por ejemplo esas paraditas, y no al txoko precisamente, que he sugerido hacer para conseguir que lo mejores sigan cruzándose los mejores pelotazos con los mejores?
¿No se merecen Albisu y Oinatz empezar la Liguilla de Semifinales después de los sudores y esfuerzos, de las ingentes cantidades de testiculina que han derramado por los frontones a lo largo de estos 4 meses que llevamos de competición? ¿Es acaso mucho pedir un descanso, un respiro, recuperar el resuello? ¿No se lo han ganado estos gladiadores? ¿Si nos pinchan, como diría el inmortal personaje de Shakespeare, del que este año se cumplen 400 de su muerte, y como dirían también nuestros pelotaris, acaso no sangramos? Si nos hacen cosquillas, ¿acaso no reímos?...
Por eso desde aquí yo sólo yo pido una tirita o un descanso, que viene a ser lo mismo, una semana, o las tres que he indicado ya puestos a pedir. Y quizás entonces escuchemos más risas. Sí, estoy seguro que todos lo agradeceríamos.
Los aficionados, los pelotaris y el Campeonato de Parejas que es lo que realmente importa. Porque si el Campeonato está bien, aficionados y pelotaris estaremos mejor. Y con ello, y por una vez en la vida, no habrá perdedores y todos saldremos ganando.  Por Toni Garzón Abad, director de cine, ensayista y creativo de publicidad   lavueltaylatuerca.blogspot.com