[Review] Juego de Tronos 5x01: "The wars to come"
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Las que han pasado y las que vendrán. Las guerras digo. La quinta temporada de Juego de Tronos vuelve más fuerte que nunca, aullando desde el muro y escupiendo fuego más allá de donde el horizonte deja ver. La que debe ser la mejor temporada en guión de la ficción de HBO abre de nuevo las puertas a lo grande, con un inicio esencial que nos grita sin dudar que Cersei Lannister volverá a ser fundamental esta temporada (no en vano es el personaje que ha aparecido en más episodios).
¿Por qué? Por el simple hecho de comenzar la temporada con un flash back en el que la joven (cuyo nombre desconocemos al inicio) se adentra en su futuro en manos de una bruja. Sangre, hijos, príncipes, tierras...todo en los ojos de una reina que nunca ha dejado de serlo y que minutos después, vemos cómo defiende ante su fallecido padre el honor que sigue perdiendo la familia Lannister después de que Jaime 'permitiera' el asesinato de Tyrion a manos ballestazo limpio.
Cersei: Y ahora nuestro padre está muerto y ese pequeño monstruo anda por ahí respirando. ¿Lo liberaste tú?
Jaime: Puede que Tyrion sea un mostruo, pero por lo menos mató a nuestro padre a propósito. Tú lo mataste por error. Con tu estupidez.
Y así sea, el montaje nos lleva al pequeño monstruo AKA polizon de Varys. Tyrion llega desolado a la ciudad de Pentos (donde vive el comerciante Illyrio Mopatis, amigo del eunuco) tras un viaje cinco estrellas. Aunque parece que la culpa por matar a su padre le persiga, en un par de escenas vemos como la solución que le propone Varys es la de huir hacia adelante, aunando lo que todas las promos ya nos anticipaban, un encuentro con entre Tyrion y Daenerys que el propio eunuco propone para así recuperar una guerra que ambos ven perdida, restaurar Los Siete Reinos.
Tyrion: Nunca me sentaré en el Trono de Hierro.
Varys: No, no lo harás. Pero ayudarás a otro a subir esos escalones y ocupar ese asiento. Los Siete Reinos necesitan a alguien más fuerte que Tommen, y más amable que Stannis. Un monarca que pueda intimidar a los altos señores e inspirar al pueblo. Un gobernante amado por millones con un poderoso ejército y de la dinastía correcta.
Tyrion: Buena suerte encontrándolo.
Varys: ¿Quién ha dicho que sea un hombre? Tienes una opción, amigo mío. Puedes quedarte aquí en el palacio de Illyrio y beber hasta morir, o puedes cabalgar conmigo hasta Meereen, y conocer a Daenerys Targaryen, y decidir si vale la pena luchar por el mundo.
Tyrion: ¿Puedo beber hasta morir de camino a Meereen?
Mientras tanto viajamos a Meereen donde llegamos a Daenerys por medio de sus súbditos. Los efectos especiales de Juego de Tronos son espectaculares y en la caída de un ídolo se comprueba perfectamente por qué Game of Thrones es lo que es más allá de su guión y de su éxito. En esas estamos cuando nos enteramos que los Inmaculados se van de putas. Así, tal cual. Rata Blanca es precisamente el personaje que acude a los servicios de una damisela simplemente para que le cante y le acaricie el pelo. Tanta ternura ya era extraña en George R. R. Martin, por lo que aparece el hombre enmascarado (pertenece a los Hijos de la Arpia) para asesinarlo.
Daenerys se enfurece y tras la negativa a aceptar la reapertura de las arenas de combate que le piden los Amos, terminamos comprobando el poder que Daario Naharis tiene en ella más allá de la escena de sexo que eliminan. Sí, elipsis con escenas en la cama de Daenerys, lo esperado tras las exigencias de la actriz. Él aconseja a la madre de los dragones que acepte la petición, aunque le recuerda un pequeño detalle que ya cerró la cuarta temporada...
..."Daario: Una reina dragón sin dragones… no es ninguna reina".
Y claro, Juego de Tronos no sería lo que es si los dragones no abren una temporada tal y como se merece. Con Drogon desaparecido (el dragon negro), Danerys va a 'saludar' a Viserion y Rhaegal, que siguen encerrados. Sólo podemos decir que los minimos han crecido un poquitín y que no están muy contentos con su querida madre (la tensión con el fondo negro a la espera de las llamas es sencillamente ESPECTACULAR.
El tercer punto fundamental del episodio es el Muro, donde Jon Nieve entrena a reclutas al mismo tiempo que engatusa a Melisandre, se postra ante Stannis Baratheon o negocia con Mance Raider. Stannis y Davos quieren recuperar el Norte y le pide a Jon que convenza a Mance para que se unan a la causa, el por qué es para devolverle su merecido a Roose Bolton tras su venganza contra los Stark. A pesar de verlo azul oscuro casi negro, Jon y Mance nos dejan otro discurso apoteósico ante el cierre de uno de los personajes más interesantes del libro y al que quizás le haya faltado algo de peso en la ficción televisiva:
Mance: No quiero morir. Y ser quemado hasta la muerte, no quiero que mi pueblo me recuerde de ese modo, quemado y gritando. Pero es mucho mejor que traicionar todo en lo que creo.
Jon: ¿Y qué pasará con tu pueblo? Preservarás tu dignidad y morirás de pie, y cantarán canciones sobre ti.
Mance: Prefiero morir quemado que arrodillarme.
Jon: El gran héroe. Hasta que llegue el invierno y los Caminantes Blancos venga por nosotros y ya no quedará nadie para cantar.
Mance: Eres un gran muchacho. De verdad. Pero si no puedes entender por qué no alistaré a mi pueblo en la guerra de un extranjero, no tiene sentido que te lo explique.
Jon: Creo que estás cometiendo un terrible error.
Mance: La libertad de cometer mis propios errores era todo lo que quería.
Todo acaba en la hoguera, con un Mance rendido a sus propios ideales y negado a arrodillarse ante un simple mortal como Stannis. Y ahí resurgen las llamas en el más profundo de los hielos, en un Muro donde no ha dejado de nevar en todo el episodio y en el que Jon Nieve vuelve a alzarse con el protagonismo. Otra vez más Daenerys y Jon Nieve, ¿por qué será?
El resto del episodio deja retazos de lo que serán historias algo más secundarias en la trama, como la lucha en Desembarco del Rey por hacerse con el poder con la intensa Margaery acechando a Tommen o la aparición de Lancel Lannister, el primo con el que Cersei tenía una relación bastante “especial” que resulta haberse unido a la secta de los Gorriones.
Detalles del Nido de Águilas, de Loras en la cama con Olyvar y de la buena relación que tienen Brienne y Pod, del que se quiere deshacer lo más temprano posible. Un comienzo apoteóstico en el que nada nos falta...porque convencidos estamos de que Arya, la pieza que le falta a este "The wars to come", será pieza fundamental en el segundo episodio de la quinta temporada.