El giro copernicano y Galileo

Sí, sí… Aunque ahora nos parezca una barbaridad, hubo un tiempo en que la gente pensaba que la Tierra era el centro del universo y que el sol y el resto de planetas circulaban, rotaban o estaban estáticos alrededor de nuestro mundo. Esto fue así hasta que apareció un día un tal Nicolás Copérnico y demostró que básicamente era al revés. Vamos, le dio un giro a la situación.

El tío, tras veinticinco años de estudio, aseguró que todo era al revés, que el sol era quien estaba en el centro y que la Tierra y los otros planetas giraban alrededor de el astro rey. Como suele pasar en estos casos, y aunque publicó el libro el año de su muerte, le cayeron palos por todos los lados y los científicos de su época lo tacharon poco menos que por un tarado. Es más, luego la iglesia quemó a todos aquellos que comulgaban con su idea, tan revolucionaria como cierta.
En el Valencia estamos asistiendo a algo similar estos días y no quiero ser yo quien me quede fuera. Vamos, en cristiano, que hay cola de agentes y representantes llamando a la puerta de Nuno Espírito Santo y/o Jorge Mendes para retomar asuntos tales como los de Parejo, Piatti o Feghouli, así como los fichajes que aún faltan por cerrarse. Todos saben, todos huelen que el técnico es el que decide y, lo que antes se trataba en el chaletito de la secretaría técnica, ahora sucederá igual, pero en el despacho del entrenador-manager o amigo del dueño, llámenlo como ustedes quieran. 
El fichaje de Neville, el de Caio (a ver cómo acaba el tema), el probable de Bakkali, los nombres que suenan... todo huele a nuevo, a cambio, a oficialización de un nuevo statu quo que está de camino. Y, por si faltaba algo para alterar la paz estival, va y suelta Amadeo Salvo que algún día volverá a ser peñista de 'a pie'. Imagino que las palabras del presi son ingenuas, carentes de más transfondo que la lógica aplastante del tiempo, pero dadas las circunstancias, son inquietantes. Amadeo se maneja bien en estas tesituras, pero no es menos cierto que lo que está de moda en el Cap i Casal ahora es la ropa portuguesa... El giro que ha dado la situación con la entrada de los asiáticos en escena es notable.
¿Y todo este giro significa que el resto de planetas dejen de ser importantes? Pues no. Faltaría más. ¿O se imaginan un Valencia sin Presidente Ejecutivo o una Academia sin director que la coordine? ¿A que no? Pero tampoco, a estas alturas de la vida vamos a empezar a cuestionarnos si el sol gira alrededor de la Tierra, o si Peter Lim es el que manda, para lo bueno… y para lo malo.
Por eso, lo inteligente es abrir la mente, dar un paso adelante y echar mano de ese 'palabro' que está tan de moda y potenciar nuestra "resilencia", que no es otra cosa que a la capacidad de sobrevivir ante las adversidades. Y ahí, Amadeo, como presidente, y el Valencia como institución han demostrado ser unos maestros. No olviden que el mundo, como dijo un famoso seguidor de Copérnico, Galileo Galilei, cuando le obligaron a negar a su maestro, "Y sin embargo se mueve". Pues con la pelota, es igual. Pase lo que pase, los que mandan son los resultados.
Ah! Casi se me olvida. No quisiera acabar contarles que este fin de semana, mientras disfrutaba del Campeonato Nacional de Fútbol 7 con mis amigos de Futplaya el tema principal de conversación entre los futboleros, guerras internas del Valencia aparte, no fue otro que la venta del Levante. Toda España mira con 'ojos golositos' la oferta de Sarver. No aceptar la propuesta, si es tan buena como promete, sería -desde mi humilde opinión- un ejercicio de riesgo e irresponsabilidad supinos. Feliz semana.
David Torres
Delegado ElDesmarque Valencia