Es una suerte haber coincidido con Juan Roig
Esta semana me vais a perdonar no escribiré de fútbol, o mejor dicho, no solamente de fútbol. Como periodista deportivo y amante del deporte que vive en Valencia, estoy en la obligación en contar lo que veo que sucede a mi alrededor al margen de si el Valencia CF acabará la temporada en tercer o cuarto lugar o si el Levante se salvará con cinco o seis jornadas de antelación. Quizá por eso este texto tenga menos recorrido que otros, pero no me quiero privar de contarles a los que lo lean la inmensa fortuna que siento en coincidir en gustos con Juan Roig.
El otro día acudí al acto de presentación del sexto proyecto FER. Me quedé hasta el final, pensando, reflexionando en silencio y admirando L'Alqueria del Basket. Lo he escrito alguna vez pero lo repito: id a verla. Es espectacular. No somos conscientes los valencianos de lo afortunados que somos teniendo esa instalación que es top mundial. Bueno, con esa instalación, con el nuevo pabellón Arena para el Valencia Basket que planea Juan Roig y, en general, con su apuesta decidida por el Maraton, el circuito del Río Turia o el running en general.
Roig con su dinero y sin más obligación que la que le dicta su conciencia, ha decidido gastarse las perras en que su ciudad sea mejor, tenga mejores eventos deportivos, podamos asistir a eventos como el Mundial de Medio Maratón o tengamos la carrera de los 42 Km envidiada por todo el planeta. En definitiva, que la gente sea más feliz, en especial los deportistas. Y eso, creo que es justo que, de vez en cuando, nos paremos a pensarlo. No te digo que estemos todos los días dándole las gracias, pero de vez en cuando, es justo reconocer lo que ese hombre ha hecho y hace por el deporte de la tierra.
Pensaba sin ir más lejos que, de los 127 deportistas que tiene en el Proyecto FER ¿cuántos no estarían ahora en el deporte de competición sin su apoyo? Pensaba también ¿acaso el Maratón habría recuperado el esplendor que tiene? ¿O existiría el Valencia Basket, habría ganado la Liga? ¿Tendría la ciudad esas 14 canchas impresionantes para albergar a tantos niños haciendo deporte a la vez como es L'Alqueria del Basket? Pues no, o probablemente no. Y, en un mundo en el que la norma es lo contrario, creo que toca darle el reconocimiento que tiene al asunto. Por eso, esta semana, parafraseando al propio Juan Roig (o más concretamente a su madre), me hago eco de aquello de que "si es bonito recibir, aún lo es más dar". Así que, al menos por mi parte, gracias. Feliz semana.
David Torres
Delegado de ElDesmarque Valencia