Cuarentena sin fútbol, Día 20: Un Viernes de Dolores diferente para mis Lolas
Viernes de Dolores. Llegó el día. El Día para muchas familias en esta época, como es mi caso. El vigésimo ya de cuarentena por culpa del dichoso coronavirus que este año ha cambiado la vida de mucha gente. Y se haya llevado y quitado la de otras tantas. Un día que siempre era de fiesta ya por la noche en mi familia, con varias Dolores y Lolas de celebración.
Pero hoy es un día diferente. Aunque también especial. Metidos en casa, salvo mi mujer, la fiesta se prepara con más ganas que nunca. Será más recogida que nunca, pero vale. Vaya si vale. La sorpresa para mi mujer, para mi hija Lola y hasta para mi suegra Loli. Hay para todas. Sobre todo para la farmacéutica que se deja el alma cada día en la farmacia. De momento aguanta el tirón como una campeona. Lo que es.
Mi hija ha preguntado varias veces que cuándo le daremos el regalo por su santo. Ya he dicho que es un día diferente pero eso no quita que tenga su alegría. Las sorpresas existen y ya sabe que el regalo tendrá que ser otro día porque papi no ha podido salir y mami está todo el día en la farmacia. Eso hasta que se entera que se puede comprar online y que te lo pueden traer a casa. "¿Esos repartidores sí pueden salir?".
Sí, de momento pueden. Y han hecho posible que mi hija hoy sea un poco más feliz. Pero sobre todo por estar todos sanos y juntos, porque muchas familias, también con Dolores y Lolas entre ellos, no pueden decir lo mismo. Ánimo a toda la gente, poco a poco vamos a salir de esta situación. Costará, pero saldremos. Y felicitades no sólo a las Dolores, Lolas y Lolis, sino a todas las personas que trabajan para ayudar a los enfermos de alguna manera. Felicidades, Lola.