Cuarentena sin fútbol, Día 67: ¿A cuántos grados dicen que muere el 'bicho'?
Soy muy caluroso, lo reconozco. Quiero el frío y a lo mejor viviría más tranquilo en Groenlandia, pero es que no aguanto este calor. Y menos pasar de la manga larga a las chanclas y el bañador casi de un día para otro. Tras 67 días de cuarentena por el maldito coronavirus digo ya que este calor no lo aguanto más tiempo. Y aún falta lo peor de lo peor.
La piscina ya debe tener el agua menos fría, porque la semana pasada era inaguantable. Cuando tenga un hueco me daré un chapuzón. O dos. Los niños son más valientes, también tienen más tiempo, y disfrutan con el agua. Digo yo además que tantos grados harán que el asqueroso bicho deje de apretar. Cada vez aprieta menos porque muchos estamos cumpliendo las normas, pero debe quedarse casi a cero. Sólo así estaremos tranquilos.
Desde hace semanas hay investigadores que nos dicen que el coronavirus pierde fuerza con las altas temperaturas. Si se da otra vueltecita por Sevilla, seguro que se le quita las ganas de volver. Todo eso contando que lo de los grados es verdad, que ya hay que fiarse de poca gente. Pero a algunos todavía hay que hacer caso, porque yo espero que el coronavirus afloje a 35 grados.
A quienes no se le quitan las ganas de salir son aquellos que disfrutan como cochinos en charco en un bar. Todo pegaditos, espalda con espalda. Como diría mi hija de dos años, les importa todo un pimiento y una manzana. ¿Que es malo? Pues da igual. ¿Que puedo infectar a otros? Pues también da igual. Así nos va, porque podríamos estar mucho mejor. Por eso, con este calor, quédense en casa que están más fresquitos. Y más seguros. Ya habrá tiempo para coger una insolación por la calle. Ojalá el bicho se vaya.
