España condecora a Francia por su colaboración en materia deportiva
El ministro español en funciones de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, condecoró hoy al secretario de Estado francés para el Deporte, Thierry Braillard, por su apoyo a España en materia deportiva y su contribución a la proyección en Francia de una imagen positiva del país.Méndez de Vigo le hizo entrega de la Encomienda con placa de la orden civil de Alfonso X el Sabio, con la que desde hace más de un siglo España muestra su gratitud hacia quienes, desde otros países, "destacan por su actividad en los ámbitos educativo, cultural y deportivo, y contribuyen a estrechar la cooperación institucional".
"Los intercambios entre nuestros países son fluidos y constantes", dijo en París el ministro en funciones, según el cual ambos países han avanzado juntos "en temas tan relevantes como el saneamiento económico del deporte" o "la lucha contra el dopaje y contra la manipulación de las competiciones deportivas".
Francia y España, en su opinión, comparten una visión "muy similar" del papel público y social que desempeña el deporte como proyecto de superación nacional
Méndez de Vigo destacó en concreto la estrecha relación mantenida por Braillard con las autoridades deportivas españolas y las gestiones impulsadas desde su Secretaría, que culminaron entre otras con la afiliación del Jockey Club de España a la Federación Internacional de Autoridades Hípicas.
"Estoy convencido de que Europa como construcción política supranacional, como territorio común de ideas y creencias compartidas de libertad y de igualdad necesita del deporte como herramienta de integración", añadió el titular español.
En sus respectivos discursos alabaron los méritos deportivos de uno y otro país, y se retaron de forma amigable de cara a las próximas competiciones en Francia.
"Espero que en las próximas semanas veamos a Nadal ganar el Roland Garros y a un español el Tour, y esperamos con impaciencia la selección de fútbol en la Eurocopa", dijo Méndez de Vigo, mientras que Braillard apuntó el orgullo que le supondría ver a sus dos equipos nacionales en la final.