Nadal y Mo Farah en nueva lista por tener exención para sustancias prohibidas
El tenista español Rafa Nadal y el atleta británico Mo Farah aparecen en una nueva lista publicada hoy por el grupo de hackers rusos "Fancy Bears" con deportistas que habrían consumido sustancias prohibidas por disponer de exenciones de uso por motivos terapéuticos.
Nadal es el único deportista español que aparece en la relación de 26 atletas de todo el mundo hecha pública este lunes, la cuarta entrega de las filtraciones que desde hace días publican estos piratas informáticos.
En el caso del tenista español, el consumo no se refiere a los últimos Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, sino que se citan dos ocasiones en 2009 y 2012.
En la ficha sobre Nadal, que se cuelga en la página web del grupo, aparecen todos sus datos personales y la autorización "para el uso de las sustancias prohibidas mencionadas más abajo".
El 23 de septiembre de 2009 se le autoriza una sola dosis intramuscular de betametasona (acetato), por pare del doctor Stuart Miller de la Federación Internacional de Tenis.
Y el 30 de julio de 2012 la autorización es para varias dosis de una sustancia corticoide (tetracosactide), por el mismo doctor.
En el caso de Mo Farah, cuatro veces campeón olímpico, las exenciones tampoco corresponden a Río. Una de ellas es de octubre de 2008 y otra en julio de 2014 para utilizar el corticosteroide "triamcinolona" y "morfina".
La última lista desvelada por los hackers, que aseguran que proviene una vez más de la base de datos de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), también figuran los jugadores de hockey sobre hierba argentinos Lucas Martín Rey y Facundo Callioni.
El pasado día 16, también hicieron pública otra relación de once deportistas en la que figuraban tres de Australia, uno de Dinamarca, dos de Alemania, uno de España y cuatro del Reaino Unido, participantes en competiciones de boxeo, ciclismo, remo, tiro, natación y tenis.
La AMA confirmó el pasado día 13 haber sido víctima de un ciberataque por parte del grupo de piratas informáticos autodenominado "Fancy Bear", que identificó con un grupo de espionaje ruso llamado Tsar Team (APT28) y que accedió ilegalmente a la base de datos del Sistema de Administración y Gestión Antidopaje (ADAMS) a través de una cuenta del COI para los Juegos de Río 2016.
Desde entonces el grupo ha publicado datos médicos confidenciales de deportistas de elite, que disponen de exenciones para uso terapéutico de medicamentos autorizadas por federaciones internacionales y organizaciones nacionales antidopaje, por lo que la AMA hizo una serie de aclaraciones.
"Hay deportistas que padecen enfermedades o están en una situación que requiere una sustancia o un método que figura en la relación de prohibidos y en esos casos ellos tienen que tener una autorización de uso terapéutico (TUEs) de la misma.
Según la AMA, "estas exenciones solo las conceden las federaciones internacionales, las agencias nacionales antidopaje (NADOs) y los organizadores de grandes competiciones (MEOs) tras un exigente proceso de revisión definido en el Estándar Internacional de Exenciones de Uso Terapéutico (ISTUE) y la evaluación de tres médicos especialistas en medicina deportiva y/o otros especialistas relevantes".
El organismo que preside el británico Craig Reedie recordó que las exenciones están sujetas a evaluaciones tanto de la propia AMA como de las agencias antidopaje nacionales y lamentó que atletas que están en disposición de estos documentos "sean objeto de debate público en base a una información médica, confidencial y parcial".
"No se debe exigir a los deportistas que justifiquen públicamente sus exenciones. El programa es una parte rigurosa y necesaria del deporte de elite y ha sido ampliamente aceptado por atletas, médicos y organizaciones antidopaje", añadió la AMA.
La primera filtración implicó a varias campeonas olímpicas de Estados Unidos, entre ellas las hermanas Serena y Venus Williams (tenis), y la gimnasta Simone Biles, una de las grandes estrellas de los Juegos de Río al colgarse cuatro oros, en el consumo de sustancias de dopaje.
En su momento, la Federación Internacional de Tenis confirmó que los documentos sacados a la luz por los piratas informáticos son "auténticas exenciones terapéuticas" que se concedieron "en el marco del programa antidopaje del tenis y de acuerdo con los estándares internacionales de la AMA".