Txikon: me siento con muchas ganas para enfrentarme al Everest
El montañero Alex Txikon, que pretende ser el primero en hacer cima en el Everest (8.848) en invierno y sin oxígeno artificial, ha dicho hoy que se siente "con mucha fuerza, con ganas de enfrentarme al Chomolungma, junto con mis amigos y equipo, que por cierto está funcionando a la perfección".En una crónica enviada desde el campo base del Everest, donde descansa desde el jueves tras pasar seis días equipando la montaña hasta los 7.800 metros, ha explicado que permanecerá unos cinco días de descanso antes de emprender de nuevo la subida en esta semana entrante.
"Creo que no nos debemos precipitar, acabamos de empezar; nos toca pensar con la cabeza fría e intentar atinar con los partes meteorológicos", ha comentado el alpinista. Txikon tiene "margen de maniobra" ya que han equipado mucho más rápido de lo previsto hasta los 7.800 metros.
Pero, además de narrar los hechos, Txikon ha querido insistir en que en el lado humano y las sensaciones: "Creo que la gente tiene una opinión equivocada hacia nosotros, de superhombres, de alocados, incontrolados, insensibles; de hombres de hierro (en mi caso de cemento) o quizás de no tener miedo a la muerte. Alguno incluso pensará que somos inmaduros".
"Pero no es así. Sentimos, padecemos, sufrimos y no nos queremos marchar de aquí; pero asumimos el compromiso y el riesgo de nuestros actos, a veces, con más valentía, y en otras, con más acierto".
El alpinista vizcaíno ha desvelado una anécdota para insistir en que también pasa miedo: "He de sincerarme y contaros que hasta más de 24 horas después de haber bajado al campo base no he tenido la valentía de quitarme los calcetines: por cobardía. Sí, por miedo a no verme los pies, pensando que pueden estar congelados. Ahora, apenas me duelen, pero el dolor ha sido tan intenso que he temido que todo acabe aquí".
"Por tanto, no existen los superhombres, ni las supermujeres. Yo, al menos, no soy uno de ellos. Mirar que miedoso que soy, y no será ni la primera ni la última vez que me dará miedo quitarme los calcetines, puesto que yo no soy un superhéroe", ha concluido el montañero.