Doblete cubano en la final de salto de longitud
Los cubanos Maikel Vidal y Lester Lescay ocuparon las dos primeras plazas del podio en la final de salto de longitud de los Mundiales juveniles de atletismo que se disputan en Nairobi, en una segunda jornada de competición en la que la brasileña Lorraine Martins rozó las medallas, tras concluir cuarta en los 100 metros lisos.Vidal, que llegó a la capital keniana con una mejor marca de 7,85 metros, superó en tres centímetros su registro personal para colgarse con un salto de 7,88 la medalla de oro, que permite a Cuba conservar su dominio en una prueba en la que el también cubano Maykel Massó se alzó con el triunfo hace dos años en los Mundiales disputados en Cali (Colombia)
"Estoy muy contento con la medalla de oro, sobre todo después de mejorar mi marca personal. Quiero seguir mejorando y creo que aún tengo un largo camino por recorrer. Quiero saltar como -Iván- Pedroso -campeón olímpico y cuatro veces campeón mundial-, quiero saltar mejor que Pedroso", señaló un eufórico Maikel Vidal en declaraciones difundidas por la organización.
Un ambicioso objetivo para este joven saltador, de tan sólo 17 años, que en los últimos doce meses ha mejorado en 28 centímetros su plusmarca personal.
Progresión que permitió a Maikel Vidal proclamarse este jueves campeón del mundo juvenil por delante de su compatriota Lester Lescay, que debió "conformarse" con la medalla de plata en Nairobi con un salto de 7,79 metros.
Completó el podio el rumano Andreas Bucsa, que se vio beneficiado por un vendaval -2,8 metros por segundo a favor-, para hacerse con la medalla de bronce con un tiempo de 7,47 metros.
Un podio que se le escapó por tan sólo 13 centésimas a la brasileña Lorraine Martins, tras concluir cuarta, con una marca de 11,80, en una final de los 100 lisos en la que se impuso la turca Mizgin Ay.
El triunfo tuvo que decidirse por la "photo-finish", ya que la otomana firmó el mismo tiempo -11,62- que la polaca Magdalena Stefanowicz, plata, por delante de la jamaicana Kevona Davis, que no pudo responder a su papel de máxima favorita, tras colgarse el bronce con un crono de 11,67, 43 centésimas más que el crono -11,24- con el que la antillana llegó a la cita mundialista.
Por su parte, el alemán Timo Morthoff se alzó, con una marca de 20,72 metros, con el oro en una final de lanzamiento de peso, en la que el bielorruso Mikhail Samuseu se colgó la plata con un registro de 19,99, y el sudafricano Jonathan De Lacey logró el bronce con un mejor registro de 19,93 metros.
Completó la nómina de ganadores el francés Steven Fauvel, que se proclamó campeón del mundo juvenil de decatlón con un total de 7.559 puntos, por delante del letón Olegs Kozjakovs, plata con una marca de 7.377 puntos, y el alemán Leo Neugebauer, bronce con una puntuación de 7.204.