El keniano Cherono y el etíope Desisa protagonizan un sprint histórico
La 123 edición de maratón de Boston dejó al keniano Lawrence Cherono y al etíope Lelisa Desisa como los grandes protagonistas de un sprint histórico que definió al nuevo campeón de la carrera más antigua que se disputa en Estados Unidos en el tradicional Día de los Patriotas.
Después de haber recorrido más de 42 kilómetros ambos atletas decidieron al nuevo campeón en un sprint que se definió con dos segundos de diferencia a favor de Cherono, que debutaba en la prueba.
El final más igualado que se daba en la meta del maratón de Boston desde la edición de 1988, que también ganó un keniano, Ibrahim Hussein.
El triunfo de Cherono permitió de nuevo al atletismo keniano tener a un representante como campeón por tercer año consecutivo y a siete corredores entre los 10 primeros.
Esta vez, ambos corredores estaban al limite de sus reservas físicas y Cherono, de 30 años, fue al que le quedaron un poco más para sacar dos segundos a Desisa y quedarse con la victoria tras establecer un tiempo oficial de dos horas, siete minutos y 57 segundos, dos menos que el etíope, ganador en la edición del 2016.
El gran derrotado fue el keniano Kenneth Kipkemoi, quien se puso a la cabeza en la última fase de la prueba, pero al final le faltaron las fuerzas y se vio superado por Cherono y Desisa, ganador en Boston en la edición de 2016.
El drama y suspense que se vivió en la prueba masculina no existió para nada en la femenina con la nueva campeona, la etíope Worknesh Degefa, también debutante en la prueba, que desde el inicio se mostró superior al resto de las participantes y siempre estuvo en el grupo de cabeza para cruzar la meta con un tiempo de 2h23:31.
La mejor muestra fueron los 42 segundos que le sacó de ventaja a la segunda clasificada la veterana de 39 años, la keniana Edna Kiplagat, ganadora la edición del 2017, que paró el crono en 2h24:13.
También hubo nuevos campeones en las pruebas de sillas de rueda con el triunfo del estadounidense Daniel Romanchuck, en la masculina, quien a sus 20 años se convierte en el ganador más joven de la carrera y también el primer atleta local que lo consigue desde la edición de 1993 al establecer un tiempo de 1:21:36.
La suiza Manuela Schar fue la ganadora que de alguna manera cumplió con los pronósticos al estar entre las favoritas al triunfo, el segundo que consigue en Boston, tras haberse proclamada campeona por primera vez en el 2017, aunque su tiempo de 1:34:19 fue peor que el establecido hace dos años (1:28:17).
En cuanto a los premios que recibieron los nuevos campeones, Cherono y Degefa recibieron un cheque por valor de 150.000 dólares, mientras que Romanchuck y Schar ganaron 20.000 dólares cada uno.
De nuevo, la organización del maratón de Boston, que reunió a 30.000 participantes, fue perfecta, mientras que el dispositivo de seguridad no registró ningún tipo de incidente y las condiciones meteorológicas volvieron a ser por segundo año consecutivo, de lluvia al comienzo, baja temperatura y viento.
La otra buena noticia para los organizadores y la ciudad de Boston fue que la prueba del maratón generó a las arcas de la economía local unos ingresos de 200 millones de dólares que dejaron los miles de visitantes que llegaron a la ciudad para participar o presenciar la competición.