Los jugadores de VRAC y El Salvador, "supermotivados" para la final

Los jugadores del VRAC Quesos Entrepinares y del Silverstorm El Salvador se encuentran "supermotivados" de cara a la final de la Copa del Rey de rugby, que disputarán este domingo ante más de 26.000 personas en el estadio José Zorrilla de Valladolid.Y es que al reto que supone ganar al eterno rival, se suma el hacerlo ante un público muy numeroso -que ha permitido batir el récord histórico de espectadores en un partido de rugby nacional- y con el rey Felipe VI como testigo de excepción. De ahí que todos estén "deseando" saltar ya al césped del Zorrilla.
Así lo han asegurado los dos capitanes de ambos equipos, Pablo César Gutiérrez, por parte de los "queseros" y Fernando González Altés, por parte de los "chamizos", que no solo han coincidido en esa "motivación extra" con la que afrontan el derbi, sino también en que van a ofrecer "un gran espectáculo".
En este sentido, Gutiérrez ha asegurado que "no hay favoritos en un partido como éste porque, aunque el VRAC sea el vigente campeón, puede pasar cualquier cosa y para ganar habrá que presentar una dura batalla".
También González Altés ha advertido de que "será un encuentro muy duro, difícil y ajustado" ante un rival que acumula una importante racha positiva en cuanto a títulos, la cual tratarán de "romper" con un partido redondo que sorprenda al cuadro azulón.
De hecho, el capitán del Quesos ha destacado que "Juan Carlos Pérez -técnico de El Salvador- es un gran entrenador y seguro que tiene preparado algo para tratar de sorprendernos", si bien su principal objetivo ha de ser también "concentrarse al máximo", para lo cual tratarán de "aislarse" de lo que suceda alrededor.
El portavoz del conjunto colegial ha señalado, al respecto, que será "una gozada" ver tanto público viendo el partido, algo que no esperaban pero que asumen con la ilusión de que eso signifique "que este deporte siga creciendo, que enganche a más gente y lo practique más gente".
Aunque la expectación es máxima de cara a esta final, González Altés ha agradecido que "las cosas se hayan ido sucediendo de forma escalonada", lo que les ha permitido "dosificar y gestionar" mejor la posible ansiedad y afrontar el trascendental choque con "ilusión y ganas".
"Espero que este partido suponga un precedente y punto de inflexión para el rugby y que la expectación surgida signifique más socios, más cantera, más patrocinadores y más apoyo televisivo", ha apuntado Gutiérrez, quien tiene claro que "el público se va a comportar bien y de principio a fin va a vivir una fiesta".