VRAC y El Salvador se citan en un duelo histórico para el rugby nacional

VRAC y El Salvador se han citado mañana en un duelo histórico para el rugby nacional, ya que supondrá un récord de público, que se presenta muy igualado y al que ambas plantillas llegan con la máxima ilusión y con el objetivo de dejar la presión a un lado para luchar por el título de Copa del Rey.De hecho, el equipo que consiga gestionar esa ansiedad será, con toda probabilidad, el que levante un nuevo título que, en este caso, entregará el rey Felipe VI, y que supondría el séptimo para el Silverstorm El Salvador y el quinto para el VRAC Quesos Entrepinares, vigente campeón.
La expectación que ha despertado este partido ha sido máxima, no solo entre los aficionados al deporte de Valladolid, sino también entre los medios de comunicación, ya que hay más de 250 periodistas acreditados.
No es casualidad que hayan llegado a esta final los dos equipos de Valladolid, ya que ambos son los claros dominadores del rugby español en los últimos años. De hecho, de las últimas doce finales coperas, once han estado protagonizadas por el "Quesos" o por el "Chami".
En el caso del primero, cuenta en su haber con seis ligas, cuatro Copas del Rey, cinco Supercopas y una Copa Ibérica, mientras que El Salvador ha cosechado siete ligas, seis Copas del Rey, cinco Supercopas y cuatro Copas Ibéricas, lo que ratifica esa supremacía en el deporte oval español.
De cara a este acontecimiento deportivo, se ha aumentado la seguridad en el estadio, donde habrá un importante despliegue de voluntarios del Real Valladolid, de protección civil y de fuerzas de seguridad y especialistas sanitarios, con más de 25 personas que velarán por el bienestar del público.
Además, durante los días previos al encuentro, se han destacado en las diferentes redes sociales las normas de comportamiento del rugby, como mostrar respeto a ambos equipos y al árbitro, no insultar, guardar silencio cuando se lance a palos y saber convivir en armonía en el tercer tiempo.
Un tercer tiempo que se celebrará en la 'fanzone" habilitada para esta final, en la que habrá varias carpas con bebida y comida, actividades para los más pequeños y a la que acudirán los jugadores tras el partido.
Tanto el VRAC como El Salvador tienen armas para poder ganar este encuentro, ya que los actuales campeones cuentan con un juego dinámico, una gran capacidad en varias de las fases estáticas como el maul o la touch y un pateador de garantías como Griffiths, mientras que El Salvador tiene una potente delantera, una gran visión de juego y un apertura de calidad como Sam Katz.
Ambas plantillas están dispuestas a llevarse la victoria, pero también a ofrecer un buen espectáculo en un escenario excepcional, para que este logro sirva para atraer a más gente al rugby, a más patrocinadores, ampliar la cantera y concitar el interés de los medios de comunicación durante todo el año.