El Camp Nou cambia el balón esférico por el oval
La disputa de la Eurocopa de fútbol en Francia ha desplazado uno de los grandes partidos en el país galo al Camp Nou, donde esta noche se jugará la final de la Liga francesa de rugby, lo que llevará al feudo del FC Barcelona a convertirse en un escenario abarrotado de aficionados del balón oval.Después de que el Barcelona cerrase el curso en el Camp Nou contra el Espanyol (5-0), jornada previa a la proclamación como campeón de Liga en el campo del Granada (0-3), el Camp Nou lejos de convertirse en un feudo solitario y silencioso volvió a llevarse de entusiastas seguidores de Bruce Springsteen para un nuevo concierto del cantante estadounidense.
Hoy volverá a tener un lleno hasta la bandera, con récord incluido en un partido entre equipos de rugby, con la disputa de la final de la Liga francesa entre el Toulon y el Racing 92 (20:45 horas).
Barcelona, que anoche vivió una de sus veladas mágicas, con la celebración de Sant Joan, ha despertado hoy resacosa por la larga verbena, dispuesta a encarar el primero de sus tres días de puente festivo y con la llegada de casi 100.000 franceses para ver un partido de rugby, algo extraño, por ser este un deporte minoritario en la ciudad, a pesar de que no es un desconocido.
Aún con las calles medio barridas, por unas brigadas que ponen el énfasis en que las playas recuperen el tono para los primeros bañistas, tras haberse habilitado este espacio para la verbena de Sant Juan como principal escenario festivo, miles de aficionados franceses ya han empezado a llegar desde Tolón y desde París, por carretera, avión y tren.
Estos miles de aficionados se van a topar con una ciudad medio dormida, calurosa (a mediodía los termómetros no llegaban a los treinta grados) y sorprendida por un acontecimiento que la mayoría no desconocen, pues el fútbol sigue siendo el principal motivo de atención, y la mayoría considera que éste está ahora ubicado en la Eurocopa de Francia y la Copa América de los Estados Unidos.
El Camp Nou cede el protagonismo que siempre ha tenido el balón esférico, y en su defecto el grupo musical, al balón oval, y sus asientos a un tipo de aficionado inédito en este escenario.