España debe apuntalar la permanencia en el torneo de Canadá
El selección española de rugby 7 femenino afronta este fin de semana en Langford (Canadá) la quinta y penúltima etapa de las Series Mundiales con la obligación de incrementar la distancia de tres puntos que tiene sobre Brasil, su perseguidora que ocupa la undécima plaza, sinónimo de descenso.Ni españolas ni brasileñas han logrado clasificarse para los cuartos de final en ninguno de los cuatro primeros torneos de la temporada, y eso es justamente lo que intentarán las chicas dirigidas por Eusebio Quevedo en la jornada sabatina, en la que dirimirán su grupo con Australia, Fiyi e Irlanda.
Aunque las dos selecciones oceánicas son hoy por hoy superiores a España, el equipo nacional sí tiene opciones de entrar en los cuartos como una de las dos mejores terceras de grupo si supera a Irlanda, un rival al que hasta el año pasado batía con regularidad pero que ha mostrado una gran progresión.
Brasil, por su parte, tiene prácticamente garantizada la última plaza de su grupo, pues se medirá mañana con Canadá, Rusia y Francia, tres adversarios que parecen inabordables para las sudamericanas.
Quevedo ha convocado para este torneo a dos debutantes, las jugadores del Olímpico Pozuelo María Ahís y Bárbara García, y ha completado la lista con su compañera Iera Etxberria, María Losada y María Casado (INEF Barcelona), Amaia Erbina (Cisneros), Olivia Fresneda (Industriales), Patricia García (FER), María Ribera (XV Sanse), y tres jugadoras del Getxo, Bárbara Pla, Nerea Aguirre y Uribarri Barrutieta.
