Cilic se asoma al abismo para aumentar la maldición de Djokovic en Queen's
Cilic se repuso de una bola de partido en contra y de un 1-4 adverso en el desempate en el segundo set y se enfundó su segunda corona en Queen's tras la que conquistó en 2012.
Djokovic llegó al Club de Tenis de Queen's con una final en 2008 -perdió con Rafael Nadal- y un título en dobles en 2010, como mejores resultados y con el objetivo de reinar por primera vez en el torneo londinense y seguir cogiendo sensaciones de cara a Wimbledon.
Con el tercer Grand Slam a la vuelta de la esquina, el serbio, quien tuvo en la mano el partido, sucumbió y se derrumbó en el tercer set ante el que es, con toda seguridad uno de los mayores favoritos al título en el All England Club.
Por su parte, Cilic demostró el por qué de sus posibilidades y arrancó avasallando a Djokovic con el saque y los manotazos a media pista.
Encontró las esquinas y los resquicios del serbio, que aunque aguantó desde el fondo, sufrió en sus carnes los saques a más de 200 kilómetros por hora y la eficacia con ese golpeo seco y rápido del de Medugorje (Croacia).
El sol apretó en Queen's al mismo nivel que Cilic e incluso un espectador tuvo que ser atendido por las asistencias en el primer set. Djokovic cubrió su cabeza con una gorra blanca y consiguió mantenerse en pie y de una sola pieza en una primera manga, en la que tuvo que remontar un 0-40 adverso en el séptimo juego.
A medida que Cilic desperdició oportunidades -tuvo seis bolas de rotura a favor en el primer set-, Djokovic cogió temperatura y aplacó el juego de fondo a su favor.
En cuanto el croata dejó de pintar las líneas, el de Belgrado, con síntomas de recuperar la voracidad ganadora de temporadas pasadas, clavó la pala y comenzó a sacar petróleo.
En el décimo segundo juego, cuando Cilic sacó para mantenerse vivo en la manga, Djokovic hizo buena su tercera oportunidad de set y desniveló el partido a su favor.
Lejos de empequeñecerse, el croata torció el gesto, salvó dos bolas de 'break' en su primera saque del segundo set y sostuvo la pelea unos minutos, los que necesitó para volverse a ver al borde del precipicio y tambalearse preligrosamente.
Con 5-4 en contra, enfrentó su primera bola de partido en contra. Djokovic enseñó el puño desde la otra esquina, pero Cilic fue capaz de contrarrestarlo con tres saques incontestables que pusieron la igualdad en el marcador.
No titubeó con 6-5 adverso y el croata mandó el partido al desempate, lugar en el que Djokovic volvió a sacar el animal competitivo que lleva dentro, pero que se escondió cuando el trabajo estaba casi hecho.
El serbio dispuso de una ventaja de 4-1, pero la echó a perder con un Cilic que se llevó seis puntos seguidos y con ello el set.
Mientras Cilic exhibió el puño en su banquillo, Djokovic intentó reponerse del golpe a duras penas, sudando la gota gorda para sostener cada servicio.
No sería hasta el octavo juego del parcial definitivo cuando llegaron las dos bolas de 'break' a favor de Cilic, que finiquitarían el partido.
La primera la salvó el serbio con un 'ace', pero en la segunda se inclinó con un revés a la red que dejó el partido en bandeja a Cilic, quien solo tuvo que abrocharlo con un servicio en blanco.
Este es el décimo octavo título de la carrera de Cilic y el primero de la temporada, con cuyos puntos este lunes amanecerá en el quinto puesto del mundo, a solo 20 unidades del argentino Juan Martín del Potro.
Djokovic, por su parte, se queda en la posición 17, con 1.965 puntos.
Tanto el serbio como Cilic continuarán su preparación para Wimbledon (del 2 al 15 de julio) fuera de la competición, el primero con el objetivo de conseguir la cuarta corona, y el segundo con la mente puesta en resarcirse de la derrota en la final del año pasado.