El arrepentimiento de Supercell con el verdugo de Clash Royale
De los errores se aprende, o al menos eso es lo que se desprende de las explicaciones que dio Supercell en su último post en Reddit. El desarrollador Seth ha querido dar una explicación más consistente sobre el por qué los cambios de balance en Clash Royale no llegarán a mitad de temporada como mucha parte de la comunidad ha pedido insistentemente desde hace dos semanas.
En las primeras 48 horas después del balance, la comunidad se empezó a quejar tanto de los Rompemuros como de la Bruja. Para Supercell los cambios suelen tener una tendencia alcista los primeros días mientras se prueba la carta hasta que llega un momento en el que su uso desciende a unos valores más normales. Esto, es lo que pasó con los Rompemuros, de un uso masivo pasaron a un uso más comedido por lo que tendrán solo un pequeño nerf.
Sin embargo, la Bruja ha visto aumentado su uso a lo largo de las semanas de un modo paulatino hasta ser la carta más usada junto al veneno. En condiciones normales, Supercell se hubiera planteado introducir cambios a mitad de temporada debido a la presencia de la carta en un gran número de partidas. Pero los datos de Clash Royale han mostrado que no hay solo una carta fuerte, sino que son varias, como el Golém de Elixir , las que se encuentran en un estado muy fuerte por lo que el impacto se reduce como para no introducir cambios a mitad de mes.
Las razones no han convencido especialmente a la comunidad, que hubiera deseado otra respuesta o razones para no haber introducido un parche a mitad de temporada como pasó con el verdugo. A esta carta han aludido, explicando que durante la Temporada 3 aprendieron que los cambios en mitad de temporada tiraban abajo toda la estrategia de anuncios de cambios, videos de los influencers y mostraba a la compañía como inestable frente a las percepciones de la comunidad.
En definitiva, Supercell ha dejado claro que Clash Royale no va a tener cambios de mitad de temporada pese a que gran parte de la comunidad los quiera, algo que puede que no haya sentado muy bien a los jugadores.