Brawl Stars elimina las nacionalidades de todos los brawlers
La adaptación cultural de los diferentes personajes de Brawl Stars tanto en idiomas como en idiosincrasia, frases o acentos no es más que un acercamiento a ciertas regiones del mundo pero ante el debate sobre la nacionalidad exacta de cada brawler la respuesta es mucho más complicada ya que según los desarrolladores esa adjetivación no existe en el lore.
Las nacionalidades no existen dentro de Brawl Stars, con esa idea tajante se desmonta uno de los mitos más sonados de la historia del juego con la representación viva de personajes como Poco, Amber o El Primo por ejemplo en relación a la cultura mexicana, algunos de tantos ejemplos ampliados a lo largo del plantel de personajes.
Es extraño adentrarse en un debate como este teniendo en cuenta que la mayoría de personajes tienen un acento muy concreto tanto en sus frases como en la idea detrás de su composición, pero la profundidad de la historia de Brawl Stars esconde detrás de sí ima asimilación de regiones más que nacionalidades como tal.
Así lo defiende Frank Keienburg como líder del juego al aclarar una de las teorías nacidas de la comunidad en la que se defiende que los brawlers no están basados en ningún país ya que la idea del juego está centrada en la composición de personajes alrededor de un lugar común como lo es el Starr Park.
— Frank™ (FS7N) (@Frank_Supercell) May 23, 2022
Lo que sí se adaptan son las influencias regionales de algunos países del mundo y sin duda eso es un apoyo necesario para posteriormente hacer de estos brawlers un referente en determinados zonas, pero parece que como tal esas banderas nunca aparecerán relacionadas a los diferentes personajes del juego según la confirmación del propio Frank.
Aún así la opinión pública alrededor de cada brawler deja abierta la posibilidad a que al menos haya una identificación clara de determinados países o regiones con cada uno de los brawlers y así lo hace saber la comunidad con ideas como esta donde cada uno de los personajes se representa con un país, que al menos nos quede ese para soñar.