Pokémon Pocket toma la inspiración de Pokemon GO en busca del éxito

La conexión entre la idea detrás de Pokémon Pocket y la que en su día hizo triunfar Pokémon GO es más real de lo que parece por la propuesta. Aunque una nazca de un juego competitivo de cartas y la otra de una implementación tecnológica, todo pasa por el coleccionismo. Ese afán está en la naturaleza de la saga, en lema de conseguir los 150 originales y en la búsqueda de los millones de jugadores para romper el mercado.

El mobile es una de las ramas más perseguidas por todo tipo de desarrolladoras, y The Pokémon Company sabe dónde apuntar. Los beneficios millonarios de las cartas físicas del trading card game están por encima del conjunto de ventas millonarias de los videojuegos. Y por ello la suma es automática, un potenciador que una ambos mundos para llevar a Pokémon Pocket la esencia que potenció el triunfo de Pokémon GO.

La base de Pokémon Pocket es la de un juego de cartas que quiere simplificar las reglas del competitivo original para hacerlo más accesible. En esa idea ya hay una ampliación del público objetivo para llegar a millones de jugadores que no han tocado una carta física en su vida ni con un Pikachu impreso. Pero cuando el coleccionismo aparece como trasfondo, aunque sea desde una versión digital, el entorno es diferente.

La geolocalización hizo de Pokémon GO un triunfo inigualable por lo rompedor en el mercado y por las posibilidades jugables desde el móvil. Pero la concepción de los inicios no eran ni mucho menos los combates, sino recorrer calles hasta completar la Pokédex. Y eso mismo busca Pokémon Pocket, tener un amplio abanico de jugadores para enviarlos a un camino totalmente diferente.

La variabilidad del jugador potencial de Pokémon Pocket puede viajar a tantos espacios que siempre acaben en la franquicia. Algunos saltarán al juego físico ampliando así los beneficios del TCG, otros pasarán de puntillas abriendo los dos sobres gratuitos diarios, y una pequeña parte se centrará en la diversión casual de las partidas cortas.

Entre todo ello, ballenas aparte, estará la compra in-game para acceder a un punto de exclusividad extremo en apertura de sobres. Y con ello la ampliación de la experiencia, pero la base está en la búsqueda de un jugador medio que no necesariamente conozca el juego. Ni siquiera debe ser competitivo, y sólo hay que ver los anuncios de Pokémon Pocket.

La gran mayoría de los mensajes están centrados en la colección de cartas, en los diseños, en la inmersión de algunas creaciones. Y ese es el punto de inflexión para llegar más lejos, porque parte de la jugabilidad es ese momento de descubrir cartas y completar más allá de los combates.

Porque la realidad es que el juego de cartas físico nunca ha funcionado en el online como se debería, y este es un intento superior. Pokémon TCG Live es la aplicación del juego de cartas que llegó hace poco más de un año, y apenas ha funcionado. Como tampoco lo hizo anteriormente el juego con descarga propia desde la web oficial.

Esto es diferente. El colega con el que jugabas a Pokémon GO hace años lo probará, porque tiene la experiencia cozy, los pokemon de otra época y la brillantez de cartas diferenciales. Y si caen unas cuantas partidas, mejor, pero no es el fin para amasar más millones en The Pokémon Company.