Age of Empires Mobile ya es una realidad, pero no es lo que se esperaba

Tras un par de años de espera, Age of Empires Mobile aterriza en iOS y Android. Un lanzamiento muy esperado, siendo un título que ha marcado a muchas generaciones. Trasladándonos a un épico juego de estrategia a través de las civilizaciones más míticas de la historia. Y con su buena dosis de historia para aprender de ella.

Nos trasladamos al año 1997 para hablar de un título que hizo historia. Pero quizá el bombazo llegó un par de años más tarde con Age of Empires II: The Conquerors, que fue todo un furor en la era de los cibercafé junto al Counter-Strike. Los años pasaron, y siguieron llegando nuevos títulos y versiones mejoradas, hasta llegar al Definitive Edition de 2018.

En Age of Empires, tomamos el mando de una antigua civilización. En función de la elegida, tendremos ciertas habilidades mejoradas, o diferentes tropas una vez vayamos avanzando de era. Desde los míticos elefantes de guerra persa, hasta el letal ejército de arqueros chinos. Todo comienza de manera muy básica, con un puñado de aldeanos que deben talar madera y conseguir comida. Y poco a poco, todo avanza hasta tener ciudades amuralladas y defendidas con enormes ejércitos con los que deberemos explorar el resto del mundo y conquistar a nuestros enemigos.

El juego llega con el sello de World's Edge, los desarrolladores de la saga original, de la mano de Xbox Games Studio y TiMi Studio Group, filial de Tencent y responsables de Arena of Valor, Honor of Kings y Call of Duty: Mobile. Una base lo suficientemente sólida como para tener depositadas muchas esperanzas en el juego. Pero aquellos que venimos de años atrás, no podemos evitar la decepción. Aunque sí puede resultar un bombazo de juego para las nuevas generaciones.

En primer lugar, cabe destacar que se nota que ha habido un enorme trabajo detrás. La ambientación es más que perfecta, y se nota que estamos jugando a un Age of Empires en nuestro móvil. Algo que nuestro yo adolescente ni soñaba con poder hacer. Casi todo está medido al milímetro para despertar ese chute de nostalgia inmediata, donde los gráficos y el apartado sonoro hacen una labor exquisita. Pero luego llega todo lo demás.

Hablamos de un free to play, y eso por desgracia conlleva muchas cosas que a muchos no nos gustaría ver en un juego como éste. Aunque comprendemos que todos los títulos de gestión de recursos tienen que implementarlos para mantener enganchados a sus jugadores en el día a día, y no solo para partidas sueltas.

¿A que nos referimos con esto? Pues por ejemplo a todo tipo de micropagos, donde por supuesto no falta el Pase de Batalla. Algo que realmente no es molesto en sí, pero todo lo que sea añadir pequeños condicionantes de Pay to Win, rechinan un poco. La parte un poco más negativa sí es que también posee un sistema gacha en la Taberna. Donde lejos de conseguir únicamente cosméticos sin impacto en el gameplay, podremos conseguir todo tipo de mejoras, materiales y héroes.

Esto hace que sea uno más de entre los muchos títulos de estrategia móviles gratuitos que existen. Uno que llega con una poderosa marca, y legiones de fans por todo el mundo, que se sumarán gustosos a esta locura. También, el boca a boca hará mucho de cara a atraer nuevos jugadores a la franquicia, que quizá descubran los juegos anteriores. Y tiene todos los elementos para ello, pues recalcamos que la labor en ese sentido es encomiable, de cara a sentir que jugamos a un Age of Empires. Pero una parte de la comunidad, no puede evitar tener estos sentimientos contradictorios.