Tremenda pitada la que se llevó al descanso del Málaga-Las Palmas el árbitro del partido Ocón Arráiz y sus asistentes. El colegiado adscrito al Colegio Riojano tuvo varias decisiones polémicas que enfadaron a jugadores, técnicos y aficionados, que lo despidieron con abucheos y silbidos de altos decibelios. La acción más protestada, un gol mal anulado a Adrián en el minuto 41 tras un córner botado por Keidi Bare. Según Ocón, a instancias de su asistente, la pelota salió en la curva del saque de esquina, pero el centro del albano iba sin rosca, por lo que no es posible que el balón saliera entero por pura ley física (ver vídeo aquí).
No fue la única acción protestada en la primera mitad al árbitro riojano, ya que justo al inicio del partido también invalidó previamente una jugada que acabó en gol de Keidi Bare por supuesto fuera de juego de Iván Alejo, quien le pone la pelota al albano. Las imágenes vuelven a dejar en evidencia al colegiado, que también calentó a la grada por una falta peligrosa en la frontal del área propia al borde del descanso, que ejecutó sin consecuencias Rubén Castro, además de por otras acciones de menos calado.
La segunda mitad tampoco fue plácida para Ocón Arráiz, que expulsó a dos jugadores y que anuló un gol a Las Palmas. En primer lugar le mostró la roja por doble amarilla a Keidi Bare (cumplirá sanción junto a Blanco en Majadahonda). La primera puede ser discutible por rasero (le perdonó una por una acción similar a Rafa Mir), pero la segunda (minuto 59) no ofrece objeciones, es una acción ingenua de Keidi ante un veterano como Cala (vídeo inferior).
Trece minutos después expulsó a Deivid, que sólo llevaba 18 minutos en el campo por roja directa (vídeo inferior). Dos minutos antes, en el 70, había anulado un gol a Rafa Mir, que estaba en clara posición de fuera de juego.