Se dieron cita en las gradas de La Rosaleda buenas dosis del talento malagueño que siguen en activo en la élite. Brahim, Ontiveros o Samu Castillejo vieron el Málaga-Almería in situ. También veteranos exblanquiazules y afincados en la Costa del Sol, como Kameni o De los Santos. El mediocentro charrúa se ha instalado en la ciudad desde el verano y la disfruta como un malagueño más. Está enrolado en el equipo de veteranos (esta mañana jugó con ellos) y anima al equipo blanquiazul cuando el tiempo se lo permite. Este verano se pasó por un entrenamiento, y ayer volvió a Martiricos para ver un partido.
Se encontró un ambiente enrarecido De los Santos, que dejó sus reflexiones sobre ello en su perfil de Twitter. "Ayer fui a la Rosaleda después de muchísimos años con mis hijos y me encontré con un Málaga dividido. Por un lado afición, cuerpo técnico y jugadores, y por otro muy lejos sus responsables directos de gestión", escribió el 'Gaucho', que lamentó la situación: "Es una pena por el pedazo de ciudad, estadio y seguidores fieles partido a partido".
Ayer fui a la Rosaleda después de muchisimos años con mis hijos y me encontré con un @MalagaCF dividido.
Por un lado afición, Ct y jugadores y por otro muy lejos sus responsables directos de gestión.
Una pena por pedazo de ciudad, estadio y seguidores fieles partido a partido.— Gonzalo de los santos (@delossantosgon1) September 8, 2019
Tras una etapa como director deportivo del Peñarol de Montevideo, De los Santos ha vuelto a España para emprender desde Málaga nuevos retos profesionales en el ámbito del fútbol. Fue jugador de aquel primoroso Málaga de Peiró, disputando un total de 93 partidos en tres temporadas (98-01). Luego llegarían otros equipos como el Valencia, el Atlético de Madrid, el Mallorca o el Hércules, pero fue aquí donde más jugó y donde siempre se ha mostrado agradecido por hacerse un nombre.