Se marcha el Málaga CF al 2020 con un sabor más agrio que dulce después de un empate cruel, con tintes de derrota por las formas. Miraba Víctor ya hacia adelante minutos después y hay algún asidero de esperanza de cara a la segunda vuelta de LaLiga Smartbank. Si hay una zona del campo donde hay un amplio margen de mejora, y para ello pedía el entrenador madrileño refuerzos de manera insistente, donde parece que se rinde a un nivel cercano al tope es en la defensa. Antes el gol de Pita, el equipo malagueño sumó casi 400 minutos, concretamente 398, sin encajar un gol. Un dato de mucha valía, más en la categoría de plata.
Del gol de Gonzalo Villar hasta el del veterano centrocampista del Lugo. Tres partidos completos con portería a cero (Numancia, Tenerife y Extremadura) y tramos de otros. Tiene más trascendencia si cabe con un equipo que le cuesta tanto hacer gol como al Málaga, uno de los menos realizadores de la competición. 17 tantos en 21 partidos, con un promedio inferior a un gol por encuentro. Son cifras que necesitan de mucha mejoría si se quiere dar un salto hacia arriba y dejar de luchar por el descenso.
Se superó frente al Lugo un dato del que era dueño el Málaga de Juan Ramón Muñiz, en la temporada anterior. Eran 331 minutos, con tres partidos sin encajar frente a Las Palmas, el Dépor y el Rayo Majadahonda. Se rompió el récord con un gol de Miguel de las Cuevas en El Arcángel ante el Córdoba. Se superó ampliamente y sólo un gran golpeo de falta directa impidió que se alargara más. Un rendimiento defensivo básico para amarrar el botín menor y estar en buena disposición de optar a la victoria, de las que andan escasos en La Rosaleda.
Me parece muy fuerte: ni adrian vale un duro, ni las peñas ,como come , valen nadañ