Si bien en las últimas horas la Real Sociedad vio truncada su idea de regresar a los entrenamientos, este lunes ha sido el Fuenlabrada, rival del Málaga y en el que se encuentra cedido José Rodríguez, el que ha recibido un escarmiento del Consejo Superior de Deportes (CSD) en forma de carta dirigida al presidente del club. Y es que el cuadro madrileño había citado desde primera hora de la mañana a su plantilla para, de forma individualizada, realizar controles de medición de grasa.
"El CF Fuenlabrada ha decidido suspender los controles de medición de grasa que había previstos hoy 13 de abril para su plantilla. Durante la mañana se ha recibido una comunicación en la que el Consejo Superior de Deportes advierte de que el Real Decreto 463/2020 no permite la apertura al público de instalaciones deportivas", señaló en un comunicado el conjunto de la capital.
A su vez, aclaró "que en ningún momento ha abierto al público sus instalaciones deportivas y que ha cumplido con el Real Decreto 463/2020 y con los máximos estándares de los protocolos sanitarios". Pero debido a esta "consideración institucional y de cara a aclarar la situación con todas las garantías se han suspendido provisionalmente los pesajes programados".
No es el primer lío en el que se ve envuelto el Fuenlabrada, ya que a principio de mes su guardameta hasta entonces titular, Biel Ribas, decidió abandonar la entidad tras no aceptar una propuesta del presidente del club, Jonathan Praena, en la que garantizaba el salario íntegro de los jugadores a cambio de que acabasen la temporada, aunque se alargase más allá del 30 de junio.
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— C. F. Fuenlabrada 🏠 (EN CASA) (@CFuenlabradaSAD) April 13, 2020