Después de estar prácticamente parados en los dos últimos meses tras la derrota ante el Athletic Club, la plantilla del Real Valladolid regresó la pasada semana a los entrenamientos en medio de fuertes medidas de seguridad por la crisis sanitaria del coronavirus. Los jugadores doblaron sesiones hasta en cuatro días, descansando sólo el domingo, algo que no será así en esta segunda semana.
El equipo ya tendrá entrenamientos en grupos de 10 como máximo tras la disposición incluida en la orden ministerial publicada en el Boletín Oficial del Estado, con el fin de estar en igualdad de condiciones con el resto de equipos, pese a que la ciudad aún no ha pasado a la Fase 1 de la desescalada. En total serán ocho sesiones a puerta cerrada, tres de ellas dobles, de las cuales cada futbolista realizará siete.
Con descanso el jueves y el domingo, los jugadores se ejercitarán por la mañana (9.30 horas) y por la tarde (17.00 horas) martes, miércoles y viernes. Además, tendrán un único entrenamiento matinal (9.30 horas) este lunes y el sábado.
Los escenarios seguirán siendo tres: los Campos Anexos, el Nuevo Estadio José Zorrilla y el gimnasio del mismo. El objetivo es incidir en la necesaria preparación física antes de la exigente reanudación de LaLiga Santander.
Como en la primera semana, las medidas de protección seguirán cuidándose de forma minuciosa. Para acceder a las instalaciones, cada persona, además de tomársele la temperatura, debe pasar por una cabina de desinfección con agua tratada. También los materiales empleados son limpiados tras cada entrenamiento y se dispone de numerosos dispensadores de gel hidroalcohólico en los espacios compartidos.