Este viernes a partir de las 16.30 horas el presidente del Valencia CF Anil Murthy se enfrenta a la Junta General de Accionistas más solo que nunca pero con un arma en el bolsillo: Va a informar sobre un paso trascendental en la venta de Mestalla. En conreto, arrojará luz sobre la venta de la zona comercial del solar donde está el estadio actual, paso imprescindible para que se pueda trasladar al nuevo estadio.
Al margen de eso, Sin Mateu Alemany; con la afición todavía en pie de guerra por las últimas decisiones deportivas de Peter Lim que supusieron el despido del propio Alemany y de Marcelino; una deuda cada vez más elevada; un estadio por construir; con la propia decisión de su sueldo como medida más polémica y con el área deportiva en el aire con el mercado de fichajes de invierno a la vuelta de la esquina.
El primertema trascendental que deberá aparecer en la Junta es la venta de Mestalla, paso imprescindible para trasladarse al Nuevo Estadio. En este sentido, ADU Mediterráneo, responsable del Residencial Acequia de Mestalla, ha cribado y traslado al Valencia CF las ofertas que tiene sobre el suelo comercial y así poder desbloquear la venta de Mestalla. Faltaba que el club dé luz verde y elija la mejor para seguir adelante con el proceso que empieza a alargarse en el tiempo más de lo previsto. Finalmente, y a tenor de lo publicado por Valencia Plaza y que ni ADU ni el Valencia CF desmienten, será laa sociedad Edificios Mestalla SL y que está participada por los empresarios Ignacio Polo Portilla, Mauro Sanchis Cabanes, José Luis Basterra Leseduarte y Ramón Espí Castelló, la que finalmente se encargue de los 41.000 metros del terciario.
La decisión es capital pues, con el dinero que el operador del suelo comercial se comprometa a pagar, ADU podrá seguir adelante, abonar al Valencia CF lo acordado (más de 113 millones de euros) y, posteriormente, el club trasladarse al Nuevo Estadio. La cooperativa esperaba anunciar el operador elegido la primera semana de noviembre pero finalmente no fue así. Existe la sospecha que en la Junta General el asunto quede desbloqueado definitivamente o haya algún anuncio al respecto.
La siguiente explicación que debería dar el presidente es la reestructuración deportiva acometida que implicó el fulminante despido de Marcelino en septiembre y el de Mateu Alemany a principios de noviembre. Con todo, a los accionistas les preocupa sobremanera qué va a hacer con la elección del director deportivo y, más a corto plazo aún, si cierra la renovaciones de Carlos Soler, Ferran Torres, Garay y si se acometen fichajes en el mercado de invierno.
Será sin duda el punto más caliente del día y a principal novedad en la próxima Junta General de Accionistas que será el 13 de diciembre radica en que el Consejo de Administración propondrá a sus accionistas (y aprobará con las acciones de Peter Lim) fijar un sueldo a sus consejeros ejecutivos de la entidad. En la documentación que se entrega a los propietarios del club y a la que ha tenido acceso ElDesmarque Valencia, se justifica por el adiós de Mateo Alemany, cuyas funciones pasan a desempeñar Anil Murthy y Kim Koh, que pasan a ser "consejeros ejecutivos" pues pasarán, argumenta el Valencia a desarrollar "funciones ejecutivas, quedando por tanto suspendidos sus anteriores vínculos con la sociedad". Su sueldo máximo nunca superará una cantidad equivalente al 1.5% del importe neto consolidado de la cifra de negocios del grupo de la sociedad. Que en este caso alcanzaría los 2.7 millones de euros como tope.
El Valencia CF cierra el ejercicio económico con un beneficio de 1.475.000 euros. El club prevé un presupuesto de ingresos de 183.747 millones de euros. También se dispara la deuda que ya supera los quinientos millones de euros (529)
Como siempre, las cuentas saldrán adelante a pesar de alguna voz crítica, cada vez menor en número por el día -viernes laborable- y la hora -16.30 h-. De los 529 millones de deuda, 323,6 son a largo plazo y 206,1 a corto plazo. Cabe señalar el incremento considerable de esta partida que sube a corto plazo 50 millones respecto al año anterior.
De esta, la deuda con los bancos, principales acreedores del club es el principal ítem y asciende a 163 millones de euros. El club, a 30 de junio, también tenía pendiente el pago de a "entidades deportivas e intermediarios" por los fichajes de jugadores de 168 millones.