Mestalla ha hablado, o mejor dicho, la afición ha hablado fuera de Mestalla. En una protesta histórica sin precedentes en LaLiga Santander millares de valencianistas prefirieron quedarse fuera protestando contra Peter Lim, Anil Murthy, Meriton y todo lo que huela a ellos. La situación, el hartazgo ha llegado a un punto de no retorno. Con la misma vehemencia que miles lo aclamaron a su llegada, este sábado miles pidieron su adiós.
Peter Lim es un aficionado, pero debe ser un falso aficionado por lo mal que quiere el club que se ha comprado. La denominación no es mía, es de Anil Murthy, que es el presidente del Valencia CF, única y exclusivamente porque el máximo accionista, prácticamente el dueño del club, al que él tildó como un aficionado en los audios de Superderporte esta semana (fan, forofo, hoolligan...) sigue queriendo que así sea. Es, por tanto, responsable último y culpable de todo lo que pasa y ha sucedido desde que llegó.
Los audios desvelados esta semana por el rotativo valenciano, vaya aquí mi reconocimiento por su labor, no me sorprendieron tanto por el contenido, pero sí por la forma. Para mí, su gran valor es que confirman tres o cuatro cosas que ya sabíamos y que describen un presente y un futuro aterradores para el Valencia y eso, me preocupa. Pero no lo digo yo, lo dicen los miles de aficionados que prefirieron quedarse en la calle en el último día de Liga para decir que están hartos. Fue paradójico, pero mientras los jugadores dieron la vuelta de honor en familia, el palco vivió su peor día de protestas y desde la calle.
Mestalla fuera, desde el balcón y dentro ahora mismo vía @ElDesmarque_VCF pic.twitter.com/ywxkfiTJit
— David Torres (@DavidTorres1975) May 21, 2022
El caso es que si Lim es un aficionado debería actuar como tal escuchar a la calle, reflexionar y tomar tres o cuatro decisiones más pronto que tarde. La primera cuestión que debe resolver, es que Anil Murthy no puede ser la cabeza visible del club ni un día más. Para determinados cargos, al margen de tu capacidad y tus conocimientos, hay que saber estar, guardar las apariencias y no haberte puesto en contra a todo bicho viviente. Los audios, aunque en un ámbito privado le retratan. La mujer del César no solo debe ser honrada, debe parecerlo. Un presidente, en la mira de todos desde que mandó callar a un estadio, no puede hablar del club, de los políticos, de tus jugadores emblema y de la sociedad valenciana con ese desdén aunque esté en privado y en una comida con desconocidos.
Los aficionados, que a fin de cuentas son tus clientes y los que sufren sus decisiones, se lo han dicho claramente: no te queremos más. Lim debe tomar nota porque la imagen del presidente públicamente no está quemada, está carbonizada, amortizada. Tanto es así que la idea de poner un portavoz con sentiment que no sea singapurense llega quizá demasiado tarde. Lim puede tener un encargado de su negocio de su máxima confianza en España, pero el Valencia CF ahora y siempre merece mucho más en su palco. Merece ante todo empatía.
La segunda cosa que tengo clara es que Peter Lim es el que toma las decisiones, el último responsable y que Anil Murthy no se va a ir porque es un empleado de Peter. Tiene que ser el propio Lim quien tome la decisión y cambiar la cara a este club y debe hacerlo porque, esta semana ha logrado lo que nadie había conseguido hasta la fecha: unir en su contra a todos, desde la clase política, a la prensa pasando por la grada. Si es que tiene interés en seguir mucho tiempo en Valencia claro, o le preocupa lo que pase aquí. Aunque si es un aficionado, imagino que estará tan fastidiado como estamos todos tras tres años sin Europa, por ejemplo.
Pero es que, además, con todos los actores sociales (políticos) en contra, hablar de retomar el estadio, de que la sociedad te ayude, que los bancos te apoyen, de que el Valencia CF como entidad siga siendo importante en la sociedad, es inviable. El divorcio de Anil Murthy, Peter Lim y Meriton con los seguidores del Valencia, con la tierra que los cobija y su entorno es total. Sirva como ejemplo la manifestación del sábado, una muestra más del distanciamiento que existe. Venceréis (porque tienen las acciones) pero no convenceréis porque el sentimiento está en otro lado. El dato es aterrador más gente fuera que dentro de Mestalla. La calle ha hablado, les toca a ellos contestar y reaccionar.
El fútbol es negocio, pero sobre todo es ilusión. Peter Lim, si tú eres aficionado del Valencia toma las decisiones que tocan porque este Valencia que vivimos ni nos ilusiona, ni nos hace felices, ni nos da alegrías
La tercera, el concepto de club de Lim y de Meriton. Limpiar, rebajar, recortar, aguantar y sufrir con los jóvenes, no se sostiene. No queremos un Valencia mediocre, queremos un Valencia como el de 2019 que luche con sus iguales y si no van a hacerlo, lo mínimo que la afición se merece es que se lo digan. Luz y taquígrafos
Es pavoroso el Valencia que describen los audios cuando dice que tiene que vender jugadores por 70 millones, como confirmó Bordalás. A este paso, le doy la razón al técnico y el club acabará más pronto que tarde en Segunda si no espabilan. "LaLiga no perdona", decía Bordalás y tiene razón. Si cada año te debilitas, o pones el club en manos de gente que sepa de fútbol y aciertas, o el fracaso está asegurado. por eso, Anil Murthy no puede ser el director deportivo de facto y todas las decisiones deportivas no pueden pasar por el OK de Lim, aunque la SAD sea suya y por muy aficionado que sea. Las decisiones las tienen que tomar hombres de fútbol, Corona, Bordalás o el que quieran y luego ya si eso mandas a negociar al gestor. Cuando el club tuvo profesionales y a estos les dejaron decidir, funcionó.
Si la gestión es deficitaria y Peter Lim él es el culpable, que lo solucione poniendo de su bolsillo, no debilitando más al equipo.
Si la gestión es deficitaria, que lo solucione poniendo de su bolsillo, no debilitando más al equipo.
Cuarta y última. Lo he escrito en muchas ocasiones. El fútbol es negocio, pero sobre todo es ilusión, sentimiento, felicidad, ganas de que tu equipo te haga sentirse orgulloso, de ser un aficionado. Lim, si tú eres aficionado del Valencia, obra en consecuencia y toma las decisiones que tocan porque el Valencia que vivimos ni nos ilusiona, ni nos hace felices, ni nos da alegrías. Es más, con el paso de los meses y las decepciones, empieza a darle igual a mucha gente y eso, es lo peor que puede pasar. Porque aunque tiene mucho valor los miles que estuvieron en la Avenida de Suecia, uno no se olvida de los miles que ni siquiera se acercaron a Mestalla. No hay mayor desprecio que el no aprecio y la desafección se ha apoderado de nuestras vidas. Así que, o toma nota y hace algo, o vende (ojalá hayan ofertas de verdad) y deja que otro que lo quiera de verdad se encargue del Valencia que siempre amamos y un día le confiamos. Lo que sea, pero así no se puede seguir. Feliz semana.
David Torres
Delegado de ElDesmarque en València