El nombre de Antoñín ha estado en todas las salsas durante el reciente mercado invernal. Su impacto en LaLiga SmartBank no ha pasado desapercibido para algunos equipos del panorama futbolístico, que coquetearon sin éxito con el atacante y su entorno. El Málaga CF, pese a que Tebas instó al club a vender -o recabar ingresos de algún modo- por valor de dos millones de euros, no sólo respondió manteniendo a Antoñín en el equipo, sino que además le renovó hasta 2023 con ficha profesional. Un acuerdo que será presentado, como si de un fichaje se tratara, este miércoles en La Rosaleda a partir de las 13:00 horas.
Antoñín tendrá tiempo de ofrecer sus sensaciones como jugador de pleno derecho de la primera plantilla, de lucir su nuevo dorsal (el '19' que ya vistió en el último compromiso en Elche) y hasta de realizar los clásicos toques de balón sobre el césped de una Rosaleda que ya conoce bien pese a que apenas ha alzado el vuelo en la élite. Un día importante para alguien que ha pasado de jugar en el filial blanquiazul a ser clave en el devenir del Málaga y de ser relacionado con varios clubes de LaLiga Santander.
Ninguno de esos equipos se animó a abonar en el mercado invernal su cláusula de rescisión, la cual se eleva actualmente a tres millones de euros hasta el 30 de junio. El Málaga se mantuvo firme y logró la continuidad del jugador criado en La Palmilla, que este miércoles se sentará en una sala de prensa que podría tener más actividad durante la semana, ya que es posible que el director deportivo, Manolo Gaspar, haga balance del mercado invernal en los próximos días. Que hable Shaheen y arroje luz sobre la delicada situación del club ya es otra historia.
El Malaga presume de Antoñin. Si, yo creo que presume, sobre todo pensando en la posibilidad de que algún club abone los tres millones de euros que es su cláusula y que salvarían momentáneamente al equipo malaguista de desaparecer. Por tanto roguémosle a los hados de la providencia para que nos manden al salvador del conjunto blanquiazul. Y a Antoñin, si es que se marcha, desearle la mayor suerte del mundo y que triunfe donde vaya.