Mi primera vez en San Mamés: Recuerdo más el viejo que el nuevo

Txetxu Rojo atiende a Julio Garro en el viejo San Mamés tras un partido

Iñaki Murua12/10/2020 17:52h.

Leí que onfolecia es la duda entre recuerdos reales e inventados; y es que han pasado tantos años que no sé si lo que contaré de mi primera vez en San Mamés son falsos recuerdos. De todos modos, no pienso inventar para adornar la historia, historia personal con minúscula que quedó recogida ya en parte en la publicación “Historias de San Mamés” (en euskera se llamó “San Mames, beti eta betiko”; mi texto original estaba en esta lengua).

Tras unos cincuenta años, lo más nítido me ha quedado en los sentidos. El color, la impresión de pasar del blanco y negro de las antiguas televisiones y las fotos de la prensa de entonces al verde del campo bajo los focos. El recuerdo del olor a hierba húmeda. Mi memoria musical, curioso, está vacía. Lo mismo que el gusto (¿no llevaríamos nada para comer en el descanso?).

Otra impresión que me quedó grabada, supongo que por el susto que me llevé: estoy seguro de que en aquella mi primera vez el personal de la Cruz Roja llevaba casco blanco. A partir de ahí, comienzan las dudas. Siempre he asegurado que jugó Capón (ignoro si ese apellido para un defensa habrá influido).

Iribar junto a Txetxu Rojo, Susaeta y Etxeberria en San mamés (Foto: Athletic Club).

Sin embargo, nunca he recordado ni el resultado ni si jugó mi admirado Txetxu Rojo. He intentado refrescar la memoria buscando datos en Internet a partir del año aproximado y de que participara aquel jugador pero no he hecho sino aumentar mis dudas, porque también creía que había sido de Copa y entre semana, y no me acaba de cuadrar todo supongo que iría con mi padre y es posible que llevara un kaiku azul con un escudo, pero entonces no se sacaban tantas fotos.

A partir de ahí, y al estilo de aquel vídeo del Liverpool que se hizo viral, tras muchas veces acompañado, empecé a ir solo. Fui ganando mi sitio y cierto estatus en la localidad que heredé en el viejo San Mamés, empecé a ir en compañía… Y, lo que son las cosas, aunque es más reciente, no recuerdo apenas mi primera vez en el renovado San Mamés, más allá de que estaba sin terminar.